VIEDMA (AV)- El alineamiento del gobierno provincial con el kirchnerismo no provoca trato diferencial para Río Negro en relación al otorgamiento de fondos para la concreción de obra pública. Al menos así lo consideró el titular de la cartera encargada de la infraestructura, Osvaldo Mildemberger.
"Hay un acompañamiento desde el punto de vista macro pero cuando vas a hacer la gestión no es una cuestión de las decisiones políticas. Sólo con el empuje, con gestión -se logra que los convenios caminen-, hay que tener mucho contacto, amistad. Yo critico estas cosas porque degradan al Estado, no sólo al nacional sino también al nuestro", afirmó.
El secretario de Obras Públicas de Río Negro, se animó a comparar el actual gobierno con el de Carlos Menem, durante el cual a raíz de su rol en la provincia, también debió realizar gestiones en el ámbito nacional.
"En el gobierno de Menem los organismos eran más instituciones, uno elevaba la nota, ésta corría; hoy la institución es como que tiene un freno, no le dan mucha bola. Yo antes me reunía con el secretario de Obras Públicas que me daba la audiencia, si la postergaba me avisaba con dos días de anticipación porque sabían que era de afuera. Era institucional. Cuando se suscribía un convenio ese convenio tenía todo un recorrido. Hoy un convenio no camina", sostuvo.
Por su paso por el gobierno de De la Rúa, Mildemberger aclaró que conozco a muchos funcionarios actuales. "Por conocer a todos uno tiene la visión distinta del que no conoce. Con muchos hemos compartido asados, casamientos, me he hecho amigo de la gente, sin importar el color político. Desde lo macro, hay conceptos en los que acompañamos al gobierno nacional, la distribución de la riqueza, la deuda, derechos humanos, el dólar alto, en eso coincidimos. Pero cuando vas a hacer la gestión no es una cuestión de decisiones políticas", manifestó.
La crítica del funcionario también apuntó a su propia gestión. "Hay que salir de la coyuntura, porque no manejamos el largo plazo. Uno de los grandes problemas es no tener piso presupuestario, tenemos techo", sostuvo.
"Eso limita porque no se sabe qué vamos a hacer el año que viene. Yo no tengo un techo, qué voy a proyectar para el año que viene si no sé con qué fondos voy a contar", afirmó.
Y agregó: "ni sé si la obra que estoy haciendo este año va a seguir el año que viene. Y esto ocurre tanto con fondos provinciales como nacionales. Y así es como hay proyectos que fracasan".
A pesar de esta mirada crítica planteada por Mildemberger, el funcionario se mostró optimista en relación a la concreción de varias obras que se están llevando a cabo o que se licitarán en los próximos meses.
Entre esas obras se encuentran 16 proyectos de edificios educativos que se enmarcarán en el programa 1.000 Escuelas que financia la Nación.
