Apenas era el cuarto game y Rafael Nadal ya tenía a Roger Federer fastidiado consigo mismo. En el segundo set, el estoico Federer empezó a dar gritos de frustración. La paliza apenas había empezado.
El español Nadal se coronó el domingo campeón del Abierto de Francia por cuarto año consecutivo, con una auténtica exhibición de contundencia, y volvió a estropear el empeño del suizo Federer de completar el Grand Slam.
Nadal subyugó al número uno del mundo con un facilidad pasmosa, barriendo seis games consecutivos al inicio de la final y así encaminarse a un triunfo 6-1, 6-3, 6-0. Fue la peor derrota de Federer en sus 173 partidos de Grand Slam, y la final de varones más corta en Roland Garros en cuanto a games desde 1977.
La magnitud de la paliza fue tanta que Nadal, durante la ceremonia de premiación, debió pedir disculpas. "Roger, perdóname'', dijo el mallorquín. Para Nadal, segundo en el ranking, fue otra más en una serie de victorias dominantes. Apenas perdió 41 games en siete partidos en esta edición del Slam parisino. "Hubiese deseado algo mejor que cuatro games'', declaró Federer. "Pero Rafael estuvo intratable este año''.
Nadal se convirtió en el segundo hombre que se corona cuatro veces de manera seguida en la arcilla de Roland Garros. El sueco Bjorn Borg lo hizo en 1978-81. La marca de Nadal en el torneo francés ahora es de 28-0 y ha ganado 83 de los 90 que ha disputado. Sólo Borg, campeón en seis ocasiones, tiene más títulos en el certamen.
"Ganarlo por cuarta vez es algo impensable'', declaró Nadal tras recibir de manos de Borg la Copa de los Mosqueteros. "Dominó como nunca antes, como Bjorn'', afirmó Federer. Borg presenció la final desde la primera fila de las tribunas. La mayoría de los espectadores alentó al suizo, que por cuarto año seguido llegó a París en procura de convertirse en el sexto hombre que acumula los trofeos de los cuatro torneos grandes.
Pero Nadal se la ha interpuesto en el camino en cada ocasión, primero en las semifinales de 2005 y luego en la final de las tres ediciones previas. Los aficionados corearon "¡Ro-ger! ¡Ro-ger!'' en la pausas entre los games, pero Nadal se ganó sus vítores.
En un arranque sublime, acaparó 24 de los primeros 27 puntos para ponerse al frente 2-0 ante un Federer que desesperadamente trataba de impedir ser arrollado. Por ejemplo, cuando Federer apeló a la táctica de sacar y buscar la volea, Nadal embocó una pelota en globo a una esquina para el 'winner'.
Cuando Federer quiso devolver con efecto una devolución, Nadal lo dejó paralizado con un revés. Tampoco funcionó cuando Federer intentó quedarse atrás. Es que Nadal es imposible en el peloteo desde el fondo, y los errores del suizo se acumularon en demasía. Lo peor fue en el tercer parcial, uno que terminó en un 6-0.
En el match point, Federer mandó larga una devolución de derecha, y Nadal levantó los brazos en señal de triunfo. "Perder una final nunca es divertido'', dijo Federer. "Lo intentaré otra vez el año que viene''. Nadal ahora tiene foja de 9-1 sobre Federer en superficie de polvo. La única derrota fue en el Masters de Hamburgo de 2007.
El español fue caballeroso frente a su rival. "Quiero felicitar a Roger por su actitud ejemplar'', mencionó. "Todos los tenistas debemos estarle agradecidos''. Federer quedó con marca de 12-3 en finales de Slams, y todas las derrotas han sido frente a Nadal.
Fuente: AP