El mandatario señaló que los candidatos presidenciales John McCain y Barak Obama, de los partidos republicano y demócrata, respectivamente, ya comenzaron a mencionar su nombre en la campaña proselitista. Dijo que mientras alguno ha mencionado la posibilidad de una reunión, el otro la ha descartado, aunque no distinguió quién expresó el deseo de encontrarse y quién no.

"No me importa lo que digan. Ojalá el pueblo de Estados Unidos, o los que votan allá porque allá no votan todos, allá no es como aquí, allá tienen un sistema electoral extraño, pero ojalá que esa sociedad tenga el buen sentido de elegir a un presidente que valga y que se dedique primero a solucionar los problemas del pueblo de Estados Unidos y que se olvide del proyecto de dominio mundial imperialista y que respete a todos los pueblos del mundo", indicó.

Agregó que le gustaría mucho "desde ahora mismo ir preparando el terreno para, sea quien sea el nuevo presidente de Estados Unidos, comenzar a trabajar juntos, respetándose cada quien, en una guerra mundial contra el hambre para producir alimentos para que todo los niños y mujeres y hombres coman".

Mientras tanto "tenemos un presidente de Estados Unidos que quiere ser el dueño del mundo y que como ya siente que se va es mucho más peligroso", agregó. "En estos últimos meses que le quedan (a Bush) ha desatado contra Venezuela una feroz campaña mundial, ha desatado en este continente todas la fuerzas del mal.

Aquí dentro de Venezuela están comenzando a desatarse todas la fuerzas del mal y están tratando de desestabilizar la economía", aseguró. Agregó que dentro de esa campaña los más "enloquecidos" "están generando iniciativas para tratar de" matarlo y "buscan generar descontento en filas militares para generar un golpe de Estado".