ALLEN (AR).- Una fuerte ofensiva contra la intervención de la UCR rionegrina lanzó ayer el gobernador, Miguel Saiz.

Después de ratificar la pertenencia al partido pero también a la Concertación, el mandatario instó al resto de los dirigentes del oficialismo provincial a dar pelea interna, exigiendo que termine la "ocupación ilegal de nuestras instituciones".

Saiz cerró en Allen el encuentro de partido y gobierno, que poco analizó el presente de la gestión y se concertó casi exclusivamente en el aspecto político.

Con un discurso plagado de críticas a la conducción nacional de la UCR, Saiz descartó la creación de cualquier otra fuerza política y puso énfasis en el enfrentamiento y la discusión que se debe dar en el ámbito interno.

Vehemente como pocas veces en público, también marcó diferencias con el vicegobernador, Bautista Mendioroz, que minutos antes había pedido paciencia para lograr una amnistía a dirigentes radicales sancionados, entre ellos Saiz y Pablo Verani.

Mendioroz habló de "agosto o diciembre" cuando mencionó la fecha de ese posible "perdón" de las autoridades nacionales, pero el gobernador contestó luego que "no quiero esperar ni agosto ni diciembre. Quiero la normalización ya". Esa frase despertó el aplauso de unas 700 personas que se dieron cita en el CEM 24.

Otro de los que apuntó contra Mendioroz fue el senador Verani quien aseguró que no necesita ninguna amnistía porque no es culpable de nada. El ex gobernador fue propuesto luego para presidir el Comité Nacional.

Saiz recordó que ellos no se sumaron a la Concertación, sino que por el contrario, comenzaron a hablar de unificación de criterios en las elecciones del 2003 en Río Negro. Mientras que desde la UCR -en los comicios nacionales- buscaron a un extrapartidario (Lavagna) que "a los 70 días

del fracaso los dejó como Adán en el Día de la Madre".

"Por qué tenemos que ser cuatro giles los que nos hacemos responsables mediante ilegítimas sanciones de algo que el electorado - a través de las urnas- no les dio la respuesta", preguntó. Y aseguró que la UCR tiene que debatir si quiere "seguir al mandamás (por Gerardo Morales) que tiene un puntero con el que pretende cagarnos a palos o se abre a la discusión por un partido abarcativo y con ambiciones de poder".

Otra crítica al presidente de la UCR nacional estuvo rela

cionada con el conflicto del campo.

Saiz se quejó de aquellos que pretenden hacerlos "caer en la falacia del campo sí o el campo no" y precisó que "estoy con el pequeño y mediano productor, con el ganadero de Río Negro".

"Cuando oigo al ilegítimo presidente de la UCR decir que va a salir a juntar un millón de firmas para defender a la Sociedad Rural Argentina, principal opositor del gobierno de Alfonsín durante 6 años, les digo que con él no estoy, no estoy con los Bunge y Born, no estoy con los pools de siembra de capitales extranjeros, ni con Martínez de Hoz", agregó.

Saiz y Verani llegaron a Allen cerca del mediodía. Allí se registraron algunos hechos tensos, porque unas 40 personas provenientes de las tomas de la ciudad protestaban con pancartas e intentaron abordarlos. De todas maneras, el episodio no pasó a mayores y, luego de eludirlos, ambos ingresaron al encuentro político.