LA PAZ (AP/AFP).- Varios choques entre opositores y simpatizantes del gobierno elevaron ayer la tensión en el oriente boliviano, donde el domingo otros dos departamentos (provincias) someterán a referendo local sus estatutos de autonomía, en abierto desafío al presidente Evo Morales, quien debió suspender una visita a la región.
Las consultas populares, calificadas de antemano por el gobierno de ilegales, marcan un nuevo capítulo en las discrepancias políticas entre el gobierno y cuatro regiones que intentan dotarse unilateralmente de autonomía.
En el último tramo del proceso electoral de Beni y Pando, dos departamentos de limitada trascendencia económica y política, los líderes por la autonomía realizaron sus respectivos cierres de campaña, en medio de llamados del oficialismo a la abstención.
Ocho personas resultaron heridas ayer en la ciudad amazónica de Guayarerín en Beni, al noreste de Bolivia, cuando campesinos leales a Morales y simpatizantes autonomistas se enfrentaron a palos y disparos de petardos, informó a la emisora Fides el subprefecto de la zona, Agustín Vargas.
Riberalta, vecina de Guayaramerín, grupos opositores ocuparon una pista para evitar que Morales llegara a la zona, donde tenía previsto donar computadoras a escuelas públicas. El diputado opositor Hermés Vargas dijo a la emisora que la visita de Morales hubiera exaltado más los ánimos. En esta localidad, campesinos afines al gobierno y grupos contrarios a las autonomías anunciaron una marcha.
En el departamento amazónico de Pando, vecino de Beni, simpatizantes del gobierno cortaron una ruta para impedir que llegaran papeletas de sufragio, informaron dirigentes campesinos a la emisora Erbol. Transportistas de Pando se enfrentaron con los campesinos, afines a Morales.En Trinidad, capital de Beni, simpatizantes llamaron a un cierre de campaña en favor del "sí'' al estatuto autonómico.
Las campañas autonomistas de Beni y Pando cuentan con el respaldo de Santa Cruz, bastión de la oposición de derecha contra Morales, al punto de que su prefecto Rubén Costas se trasladó a esa región desde el martes para hacer campaña por los estatutos.
Unas 150.000 papeletas de sufragio destinadas a Beni fueron llevadas directamente de Santa Cruz, admitieron voceros de la corte electoral de ese departamento. El común denominador entre los prefectos de Beni, Ernesto Suárez, y Pando, Leopoldo Fernández, es que ambos pertenecen a Podemos, el mayor partido de oposición del país liderado por el ex presidente conservador Jorge Quiroga.
"Tenemos convencimiento de que el gobierno envió grupos de choque de Santa Cruz y La Paz para provocar conflictos el día de la consulta", denunció el secretario del comité cívico de Pando, Herbert Salvatierra, al diario El Deber. Por este motivo, el recalcitrante líder autonomista de Santa Cruz, Branko Marinkovic, anunció que partirá junto a jóvenes de la Unión Juvenil, un violento grupo de choque, a Beni y Pando.
En medio de esas pugnas, el gobierno encamina una negociación con sus opositores para hallar salidas a la crisis pero sin la presencia del grueso de la oposición (ver aparte)
La crisis política y regional que mantiene polarizado al país gira en torno a la reforma constitucional aprobada por el oficialismo, que promueve derechos para los indígenas y aumenta la intervención estatal, el proyecto autonomista de Santa Cruz, Beni Pando y Tarija que plantea una visión distinta del país.