ROSARIO ( Claudio Rabinovitch, enviado especial) . - "Este es Eduardo Buzzi... el de Federación Agraria", le comentó un mozo de una pizzería céntrica a una mujer poniendo su dedo índice sobre la foto de un diario rosarino, en una muestra más de que  los dirigentes del agro ya son personajes públicos.

Ni que hablar de Alfredo De Angeli, cuya figura por estas horas es la envidia de más de un político.

Ayer en Rosario, un día soleado recibió a numerosas familias que fueron llegando en autos particulares o camionetas con banderas argentinas y tocando bocina. Pero la llegada se preveía masiva recién a última hora, porque la intención de los organizadores era evitar cualquier tipo de conflictos o cruces con potenciales provocadores.

De todos modos, se pudo constatar que no hay plazas disponibles en hoteles y por la tarde se hacía difícil conseguir un taxi libre. Ayer al mediodía comenzaron los trabajos en el palco donde van a dar sus discursos los oradores.

Está ubicado a la vera del río, sobre la costanera Estévez Boero y mirando de frente al Monumento a la Bandera, del cual está separado por un parque y la amplia avenida Belgrano.

Junto a una bandera nacional aparece un cartel con la inscripción: "El Campo por un país federal". Los organizadores lucían una escarapela con la frase "estoy con el campo". El acto de hoy comenzará a las once con varios conjuntos musicales, entre ellos el que compuso el tema "Alfredo Chacarero" dedicado a De Angeli.

A la una de la tarde hablarán Luciano Miguens (SRA), Mario Llambías (CRA), Buzzi (Federación Agraria) y Fernando Gioino (o su segundo dado que días pasados sufrió una indisposición) por Coninagro; además de como se dijo, De Angeli.

Estará presente un amplísimo arco de la oposición, pero desde la organización se les tratará de no dar un protagonismo central.

En cambio no asistirá el gobernador de Santa Fe, Hermes Binner, quien acudirá al Tedeum de la fecha en la capital. Sí lo hará el también socialista intendente de Rosario, Miguel Lifchitz, pero en carácter de "anfitrión".

"Mucha gente pasa y se ofrece a colaborar, hay un clima de fiesta... de una fiesta triste porque nos gustaría que otros sean los motivos para este festejo", afirmó Miguel Trabella quien se autodefinió como productor local.

En la ciudad no se ven carteles, ni leyendas, ni pancartas de ningún partido político. Es un detalle en el que hacen especial hincapié los promotores del evento.

En la calle, literalmente todos aseguran que van a ir. "Te lo dicen todos, incluso quienes no están directamente relacionados con el campo", comentó un adolescente.

"No importa el número pero va a ser una manifestación muy fuerte", opinó un hombre que tomaba fotos del monumento de la Bandera. A metros del lugar donde hoy el campo mostrará su fuerza.