NEUQUÉN (AN).- La fiscal de Delitos Juveniles, María Dolores Finochetti, acusó ayer a un menor de edad de ser el autor del asesinato del taxista Néstor Navarrete, ocurrido en febrero del año pasado. El defensor Dardo Bordón, en tanto, abogó por su absolución. La sentencia será dictada por la jueza Mabel Folone el próximo 2 de junio.

El imputado, de 17 años, fue acusado del delito de "homicidio en ocasión de robo" y la fiscal pidió que se lo declare responsable de ese hecho. Si el fallo le hace lugar, será sometido a un tratamiento y cuando llegue a la mayoría de edad habrá una audiencia para definir si se le impone una condena.

Con los alegatos, terminó la etapa oral del juicio que se realizó en el ámbito del juzgado penal del Niño y el Adolescente. Por tratarse de un menor de edad, las audiencias se realizaron sin público ni periodistas.

El asesinato de Navarrete ocurrió el 13 de febrero del año pasado y motivó una protesta de los choferes que mantuvieron cerrados los accesos a esta capital durante varias horas.

Según se pudo establecer, el chofer -quien trabajaba con un auto prestado- acudió cerca de la medianoche a un domicilio del barrio San Lorenzo en respuesta a un pedido telefónico que recibió la base de Taxi Patagonia.

Allí subieron dos adolescentes de 15 y 16 años, familiares entre sí, quienes le pidieron que los trasladara hasta la zona de la laguna del barrio. Pero luego lo amenazaron con un revólver y lo obligaron a conducir hacia la meseta detrás del Parque Industrial.

Navarrete recibió un balazo calibre 22 disparado con un arma que nunca fue hallada. Los autores le robaron 200 pesos de la recaudación y desaparecieron, pero dejaron olvidada una mochila en el interior del vehículo.

Malherido, el taxista logró conducir hasta la comisaría 20 del Parque Industrial. Murió en la ambulancia camino al hospital.

El chico de 15 años es inimputable, y el de 16 (ahora 17) es el que fue juzgado. Para la fiscal, tiene peso en su contra que el llamado a la base de taxis fue hecho desde el teléfono de una tía del menor, que vive en la casa contigua.

Por otra parte, la mochila hallada en el vehículo se la habían regalado al sospechoso unos días antes. Y en su círculo familiar se manejaba la información de que estaban involucrado en el crimen apenas se conoció el hecho.

En el juicio fueron citados a declarar 51 testigos y la defensa formuló varios planteos de nulidad respecto de algunas de las pruebas obtenidas.