BUENOS AIRES (DyN).- El odontólogo Ricardo Barreda, condenado a reclusión perpetua por asesinar en 1992 a su esposa, a sus dos hijas y a su suegra en La Plata, saldrá en las próximas horas de la cárcel de Gorina para comenzar a cumplir el arresto domiciliario concedido por la Justicia en la casa de su novia, en la Capital Federal.
En rigor, Barreda dejó el pabellón que ocupaba en el penal para cumplimentar una serie de trámites y preparar sus cosas y, según uno de sus abogados defensores, Eduardo Gutiérrez, la medida se concretaría efectivamente en las primeras horas.
El cuádruple homicida, de 72 años, pasará el resto de la condena, que finaliza en el año 2012, en la casa de Berta André, su actual pareja a la que conoció en prisión, situada en la calle Vidal 2.333 del barrio porteño de Belgrano.
El odontólogo deberá cumplir requisitos para que la Justicia no le revoque el beneficio, entre ellos someterse a tratamiento psicológico y no salir del inmueble sin autorización judicial. "Está contento y me pidió que les transmitiera moderación a todos los medios para concretar su traslado de manera normal y que no implique molestias para terceros", señaló Gutiérrez.
La Sala I del Tribunal de Casación, integrada por los jueces Benjamín Sal Llargués, Horacio Piombo y Carlos Natiello, le había concedido el 7 de mayo último el arresto domiciliario dado la edad del condenado (que permite acogerse a ese beneficio), el tiempo de la pena que lleva cumplido y su impecable conducta intramuros.
La medida se materializó ayer, cuando la Cámara de Apelaciones y Garantías en lo Criminal de La Plata, integrada por los jueces Pedro Soria, María Oyhamburu y Ricardo Szelagowski, efectivizó la orden del órgano superior.
La medida se dictó luego que Barreda cumplió una serie de requisitos, como fijar lugar de residencia y que el Servicio Penitenciario Bonaerense (SPB) elaborara un informe sobre su conducta dentro de la cárcel que fue favorable.
El texto que dispone el beneficio, anunciado por el juez Soria, indicó que Barreda tiene que permanecer en la casa "sin salidas al exterior salvo expresa autorización del Tribunal". También se estableció "que el Patronato de Liberados de la Provincia efectúe la supervisión necesaria y brinde a través de sus psicólogos, la asistencia que fuera sugerida por las profesionales que dictaminaron en el incidente, debiendo elevarse mensualmente la constancia de su realización".