BUENOS AIRES (DyN) - La médica disidente cubana Hilda Molina se mostró ayer confiada en que, al igual que su madre, ella también pueda viajar finalmente a la Argentina para reencontrarse con su hijo, Roberto Quiñones.
"En definitiva, si Dios nos ayudó en esto, nos va a seguir ayudando en algún momento", afirmó Hilda Molina, al referirse a la posibilidad de que consiga el permiso del gobierno de Cuba para viajar a Buenos Aires.
Ayer, el gobierno nacional informó que la madre de Hilda Molina, Hilda Morejón, viajará próximamente al país, luego de que fuera autorizada por el gobierno de Raúl Castro, tras largas e intensas gestiones de la Cancillería argentina.
Algunos trascendidos señalaron que el viaje de Hilda Morejón, podría realizarse en los próximos días, aunque la especie no pudo ser confirmada oficialmente.
Desde el lunes pasado se encuentra en La Habana Verónica Scarpatti, esposa de Roberto Quiñones, quien acompañaría a Morejón cuando termine de finiquitar los trámites requeridos por el gobierno cubano para embarcarse finalmente hacia Buenos Aires.
La neurocirujana, que no puede abandonar la isla caribeña por sus diferencias con el gobierno local, dijo que agradeció "mucho" el "gesto del presidente Raúl Castro".
Consideró que en el otorgamiento del pasaporte para su madre debe haber influido que "Raúl Castro ha demostrado amor a su familia y por eso tuvo en cuenta lo que es la familia para los demás".
Explicó que fue su madre quien planteó a su hija su deseo de reactivar la tramitación de su pasaporte y fue así como "le enviamos una carta a Raúl Castro y al ministro del Interior, donde ella decía que era una anciana normal y quería que le explicaran por qué no tenía su pasaporte". "Poco después nos avisaron que podíamos ir a retirar el pasaporte", recordó Molina en declaraciones a Radio Provincia.
Molina señaló que su madre " está aferrada desesperadamente a la vida para poder lograr abrazar a su nieto. Ella quiere ver cómo viven, conocer la escuela de su bisnieto. Aunque está un poco triste porque se separa de mí".
"Ella quiere llegar allá y encontrarse con la persona que más quiere en el mundo, que es mi hijo, que es su nieto, y conocer a su bisnieto. Para mí, aunque me quede aquí, va a ser un gran motivo de alegría", dijo ayer Molina.
En declaraciones a radio Continental y al diario Clarín, la médica disidente agradeció al presidente de su país, Raúl Castro, y al matrimonio de Néstor Kirchner y Cristina Fernández por la autorización que finalmente recibió su madre, Hilda Morejón, de 89 años, para viajar a la Argentina. "Yo agradezco mucho al gobierno de Néstor Kirchner, primero, y al de Cristina Fernández, ahora. Los dos nos ayudaron. Y agradezco también a la prensa, a la comprensión desinteresada que allí hemos tenido. Tengo un agradecimiento de todito mi corazón, y que no se preocupen por mí, yo estaré bien", indicó.
Molina agregó que aún no tiene fecha el viaje de su madre, porque "faltan pocas gestiones. La esposa de mi hijo, Verónica, está acá en Cuba, y ella la va a llevar". "Ella dice que su nieto es el mejor médico del mundo y la va a mejorar, la va a atender, y ella se va a recuperar. Si a mí no me dejan salir, ella vuelve para acá", indicó.
