De Tomaso había recibido una primera estocada días atrás de parte del presidente de la AFA, Julio Grondona, quien había dicho que trabajará para la normalización del club y se mostró en contra de los gerenciamientos, aunque harían lo que determine la justicia.
A esto último se aferró De Tomaso para afirmar que seguirá en el club hasta pagar la última parte de la quiebra en febrero de 2009.
Inclusive el gerenciador había asegurado que al quedar sin efecto el gerenciamiento tras levantar la quiebra, Racing quedaría con unos 10 millones de dólares y sin deudas.
Pero De Tomaso quedó ayer solitariamente cercado por el poder político, que activó el proceso para que Blanquiceleste se vaya de Racing.
Hoy Racing tiene un juez que entiende en la quiebra, Enrique Gorostegui, un interventor, un gerenciador y un órgano fiduciario. El ministro Casal dijo que "hay un contrato de gerenciamiento vigente y un contrato válido pero sabemos que cuando vemos las circunstancias y hechos amerita que haya un criterio para que se pueda unir en una sola dirección a la institución".