NEUQUÉN (AN).- El juicio contra 28 policías acusados de torturas sigue sin jueces, y recién el lunes se podría avanzar en la integración de un tribunal que lleve adelante el debate oral.
Aunque estuvo a punto de empezar el lunes pasado, el juicio se suspendió porque la defensa de algunos de los imputados recusó a los integrantes de la Cámara Segunda por violación de la garantía de juez imparcial.
Héctor Dedominichi, José Andrada y Emilio Castro, los integrantes de la Cámara que iba a realizar el juicio, habían intervenido en favor de los detenidos cuando ocurrieron los hechos de torturas en la Unidad 11, en abril del 2004.
En esa fecha se produjo la feroz represión que ahora debe juzgarse. Dedominichi, por aquel entonces defensor, presentó un recurso de hábeas corpus a favor de los detenidos al cual Andrada y Castro hicieron lugar. A criterio de la defensora Estefanía Sauli, en esa ocasión adelantaron su opinión y ahora no pueden intervenir en un juicio en el cual los mismos presos son testigos y los policías imputados. Por eso los recusó.
Los tres camaristas le pasaron el caso a la Cámara Primera para que resuelva si corresponde hacer lugar a la recusación. Pero los magistrados que la integran, Luis Fernández y Mario Rodríguez Gómez, dijeron que ellos tampoco pueden dar opinión ya que en su momento fueron los encargados de verificar el cumplimiento del recurso de hábeas corpus.
Así las cosas, ayer se decidió hacer un sorteo para elegir tres jueces que definirán quiénes tienen que hacerse cargo del juicio. Y eso se resolverá el lunes.