Todo parece en contra de San Lorenzo: los más de 2.800 metros de altura, el contexto del partido y el resultado de ida en el Nuevo Gasómetro (1-1). Pero el equipo de Ramón Díaz, al menos en esta edición de la Libertadores, ya dio claras muestras de saber sobreponerse a las adversidades, por lo que la definición ante la Liga de Quito, en Ecuador, está abierta y se muestra muy apasionante.
El cotejo, que en nuestro país se largará a las 19:20, se disputará en un estadio Casa Blanca que será una caldera y lo arbitrará el mexicano Marco Rodríguez. El "Santo" para acceder a las semifinales deberá ganar o empatar en más de un gol, un objetivo que se abre como complicado, aunque San Lorenzo sabe últimamente de milagros (si no que lo diga River).
En la altura de Bolivia se produjo la primera hazaña "santa". A 4000 mil metros y abajo en el marcador, le dio vuelta el cotejo al Real Potosí y lo ganó 3-2. Un dato que no es menor sabiendo en las condiciones que se jugará en esta tarde-noche.
El "Pelado" Díaz aún no puede contar con el suspendido Jonathan Bottinelli, pero sí con Diego Rivero, que regresará a la titularidad.
Si bien todavía no está ciento por ciento asegurado, tanto Aureliano Torres como Bernardo Romeo tendría una luz de ventaja sobre Walter Acevedo y Andrés Silvera. ¿Por qué? Por la buena actuación que tuvieron el paraguayo y "Berni" en la "terraza" de Potosí.
Lo cierto es que los "santos" están obligados a salir a buscar el triunfo y tratar de convertir un gol lo más rápido posible, para después poder manejar más tranquilo el desarrollo ante un equipo fuerte y muy rápido adelante.