Más de la mitad del producto bruto interno argentino ya se encuentra comprometido en el pago de la deuda publica, según expresa un informe difundido ayer por del Instituto Argentino de Ejecutivos de Finanzas (IAEF).

El trabajo señala que durante el año pasado la deuda se incrementó en 36.100 millones de pesos, a pesar de haber contado con un superávit fiscal de 9.000 millones durante el ejercicio anterior. "La explicación radica básicamente en: devengamientos de ajustes de capital por las deudas que ajustan con CER. Y cambios en los valores de las monedas en que están instrumentadas las deudas (depreciación del dólar)", señala el estudio.

Así el IAEF estimó que "según la inclusión o no de la deuda con los acreedores que quedaron al margen del canje, el ratio Deuda Pública/PBI al concluir el 2007 era de 67,3 ó 56,1%". El trabajo indica que "en el primer trimestre del año, el superávit primario del gobierno nacional ascendió a 8.900 millones de pesos, lo que equivale al 3,6% del PBI en términos anuales". En su análisis de las cuentas fiscales, el Informe destaca la importante contribución al superávit primario de ingresos extraordinarios originados en utilidades transferidas por el Banco Central (BCRA), y que el gasto público, aumentando a tasas muy elevadas (33%), exhibe una leve desaceleración respecto del crecimiento de los últimos meses del 2007.