El titular de la CTA, Hugo Yasky, aseguró ayer que la Casa Rosada "demora el reconocimiento" de la central trabajadora por "fuertes presiones del empresariado y la CGT, y porque en el propio Gobierno no hay determinación política para hacerlo".

En declaraciones a la agencia DyN, Yasky agregó que lo que está haciendo el gobierno es "postergar un derecho que debería ser para todos los trabajadores, por que la democracia y la libertad sindical no solo debe alcanzar a los que están amparados por el paraguas legal de la personería gremial".

"La CTA es una central que no goza de los mismos derechos que la CGT, porque es una central que cree en la autonomía, en la no subordinación a los partido políticos, ni al estado, ni a ningún poder económico", remarcó el docente.

A su lado, el titular de la Asociación de Trabajadores del Estado (ATE), Pablo Micheli, aseguró que la presidente Cristina Fernández "niega que tenga presiones de los grupos económicos para que no haya libertad sindical, porque hay una acción política de no darla, porque no están de acuerdo con que haya democracia sindical en nuestro país".

El estatal enfatizó que con "con esa actitud los empresarios y el gobierno están demostrando que tampoco están de acuerdo para que haya una mayor distribución de la riqueza, ese es el motivo por el que el gobierno no otorga la personería gremial a la CTA".

A su vez, el diputado ultrakirchnerista, Edgardo Depetri, sostuvo que la postergación del reconocimiento de la central paralela a la CGT "es una agenda pendiente debido a un apriete fuerte de los grupos económicos y es una decisión política que el gobierno tiene que tomar porque de los contrario no se va a poder avanzar hacia la democracia sindical". "Los grupos económicos y la CGT son dos instrumentos muy poderosos que impiden la democratización a fondo del movimiento sindical", aseguró Depetri. Yasky, Micheli y Depetri, encabezaron ayer una multitudinaria concentración de la CTA frente al ministerio de Trabajo, para reclamar por enésima vez la personería gremial de ese nucleamiento. La protesta arrancó en la intersección de las avenidas de Mayo y 9 de Julio, donde los empleados públicos enrolados en los distintos gremios que convergen en la CTA se concentraron desde temprano. (DyN)