SAN PATRICIO DEL CHAÑAR (ACE).- Los residentes en la toma de esta localidad se movilizaron esta semana para solicitar la legalización de la usurpación. Ya son alrededor de 60 familias las que viven en el lugar.

La situación de la toma es compleja desde sus inicios, porque el lugar usurpado es un sector de chacras pegado a la zona urbana cuya expropiación había sido solicitada por el municipio a la Legislatura neuquina para una urbanización municipal; pero en medio del proceso, una inmobiliaria de Cipolletti adquirió el predio para lotearlo.

Los vecinos del barrio autodenominado "Unión y Fuerza" entregaron una nota con 850 firmas en el Deliberante para activar el proyecto de "expropiación" y dar marcha atrás con la ordenanza que mediante un convenio urbanístico fijó obligaciones de infraestructura urbana por parte de la comuna en el lugar comprado por la inmobiliaria.

"Pedimos la derogación de la ordenanza porque establece que el Estado invierta en favor de un emprendimiento que es privado, como ASPA", dijo Guillermo Falcón, uno de los voceros de la toma.

Los vecinos no lograron que las casi 900 firmas dieran marcha atrás con la actual situación, pero insistieron con el intendente Ramón Soto con soluciones para los vecinos.

"En principio conseguimos un compromiso de ayuda social para unas 40 familias, pero lo que necesitamos es que se nos reconozca", dijo Falcón.

Según detallaron quienes viven en el lugar, en la toma no cuentan con agua potable -la han obtenido de cañerías linderas-, ni electricidad, ni servicio de recolección de basura; en tanto los pocos que obtenían ayuda social, tras irse a vivir al lugar, la perdieron.

"Hace ocho meses que estamos en lucha: durante la temporada pudimos campearla, pero aquí hay mucha gente carenciada que ahora se quedó además sin el trabajo de las chacras y no tenemos nada: enfrentamos la tormenta de lluvia y viento con unos nailons y necesitamos de todo", indicaron Juan José Toscano y Julio Arroyo.