Viernes 16 de Mayo de 2008 Edicion impresa pag. 21 > Municipales
Los nuevos límites colindantes anuncian polémica
La Legislatura otorgó a Huergo una franja que llega hasta el embalse de Casa de Piedra. La costa del dique también era pretendida por el municipio de Roca.

VIEDMA (AV)- El dique de Casa de Piedra va camino a ser el centro de la discordia entre varios jefes comunales del Alto Valle rionegrino. La reciente aprobación de los límites entre Huergo, Mainqué y Godoy, desató una polémica que probablemente acarreará consecuencias futuras. Es que los legisladores decidieron por unanimidad otorgar al ejido de Huergo una extensa franja que va desde el río Colorado hasta el electroducto de 500 kv, incluyendo en esa área de la represa con potencial turístico, que desde el municipio de Roca se observó siempre con expectativa para su incorporación y desarrollo.

Lo hicieron siguiendo la misma lógica que con otros municipios del Alto Valle Este, como Regina y Chichinales de transferirles dominio sobre lenguas de tierra extensas en sentido norte - sur y angostas -no mucho más allá de la amplitud de las plantas urbanas- en el sentido este - oeste. Contemplaron para la ejecución del trámite legislativo la existencia de acuerdos entre los Municipios involucrados.

En este caso, la discusión se terminó de dar en las ciudades a fines de 2007. Los CD de las comunas, debatieron acerca de sus conveniencias y buscaron acuerdos que terminaron en el proyecto impulsado por Jorge Pascual y Hugo Castañón de la Alianza y Ademar Rodríguez (Frente para la Victoria).

"El punto de conflicto en esas tierras siempre estuvo dado en las posibilidades de que aparezca petróleo y las futuras regalías que eso pudiera generar en beneficio del municipio que tuviera la posesión del lugar. Roca siempre creyó que la ley no iba a salir así como estaba y por eso no se opuso al debate. Pero la ley salió y está en vigencia", afirman asesores que han trabajado en el tema límites en los últimos años.

El 29 de abril pasado el expediente tuvo tratamiento legislativo. Con dictamen favorable de la comisión de Tierras, Pascual fundamentó el proyecto y la norma fue aprobada por unanimidad en el recinto. No hubo siquiera debate y ningún diputado se percató de que la ley podría afectar los intereses de Roca sobre el dique y su proyección turística. Ni siquiera aquellos como el propio hijo del jefe comunal de Roca y su principal espada en el Parlamento, Martín Soria y Carlos Peralta.

En Casa de Piedra los lotes costeros han sido expropiados para la construcción de la represa. Como en el proceso legal algunos titulares de la tierra no fueron determinados y notificados existe un vacío que impide la escrituración a favor de algún municipio . No obstante, hace tiempo el DPA permitió que allí Roca empezara a establecerse con posibilidades de iniciar loteos.

"Otra norma anterior nos otorga el dominio sobre todos los terrenos del perilago. Así que ahora hay dos leyes que se superponen", manifestó ayer Carlos Soria, ofuscado por la nueva ley. "Soria se debe referir a un acuerdo de la época del proceso que no fue ratificado por Ley y que le otorgaba a Roca y a Cipolletti la mayor parte de la tierra", le contestó Pascual.

Por su parte, Soria -hijo- intentó buscar explicaciones aduciendo que si la cuestión fuera tal como parece y Roca se viera afectada en sus intereses podría impugnar el acuerdo y pedir la derogación de la ley.

"El ejido tiene que llegar hasta donde el municipio tenga capacidad de brindar atención. Y Huergo no puede atender con esta administración más allá de alguna pequeña urbanización al norte del canal grande. Supongo que todos los puesteros y los vecinos que han sido atendidos por Roca deben estar felices al saber que Huergo los va a atender", ironizó, su padre, el jefe comunal Carlos Soria.

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