Oscar Ahumada ya se arrepintió de lo que dijo, Diego Simeone lo respaldó sosteniéndolo entre los titulares que el domingo jugarán con Independiente, los hinchas ya lo denostaron, por internet y frente a su casa. Sin embargo las palabras del volante central siguen encendidas.
Ayer, el presidente de River, José María Aguilar, decidió sancionar económicamente a Ahumada por sus declaraciones en contra de los hinchas y dirigentes del club, después de una reunión que mantuvo con el propio jugador, en la que igualmente le transmitió tranquilidad. Falta definir el monto de la multa, que se determinará en la próxima reunión de Comisión Directiva. ¿Por qué la sanción? "Por herir la sensibilidad de todos los riverplatenses".
El presidente de la institución y el mediocampista se reunieron ayer a la tarde en la oficina del dirigente en el
estadio Monumental, en un breve encuentro donde el jugador aclaró nuevamente lo que quiso decir y aceptó el castigo impuesto. Finalmente el encuentro fue conciliatorio y no hubo discusiones. Ahumada, ansioso por darle un punto final a este tema, llegó al primer piso del Monumental veinte minutos antes de las 15:30, que era la hora señalada.
¿Cuántos piensan como él?
Ahumada había dicho que en la noche de la eliminación de la Copa Libertadores frente a San Lorenzo cuando el equipo de Boedo descontó "la gente enmudeció" y sostuvo que
en La Bombonera la hinchada de Boca "se vino encima" en un encuentro que River ganaba 2 a 0.
Horas después de esas declaraciones, sin rectificarse, salió a pedir disculpas "a los verdaderos hinchas de River", pero atacó a los dirigentes "que se meten con las opiniones de un futbolista y nadie se mete en temas dirigenciales por la venta de tal jugador". Si bien no lo va a reconocer, el volante central está molesto con algunos compañeros por no salir a respaldarlo, ya que consideró expresar "lo que muchos saben y nadie dice".
Por la mañana el plantel de River estuvo reunido con el objetivo de unificar criterios y de bajar decibeles a las declaraciones. La reunión se llevó a cabo antes de la práctica en Ezeiza, donde en primera instancia, el cuerpo técnico tuvo una charla de quince minutos con los referentes del equipo, el propio Ahumada, Ariel Ortega, Ferrari y Abreu. Luego, el entrenador Diego Simeone se retiró junto a su ayudante Nelson Vivas y se juntaron todos los futbolistas del plantel para mantener otra conversación. Así fue un día más en la vida del puntero.
