SAN CARLOS DE BARILOCHE (AB).- A pedido de los familiares de la víctima la Justicia investigará la muerte de un hombre de 33 años que ya estuvo internado en otras oportunidades por una presunta pancreatitis y ayer a las 20 murió en un sanatorio privado.

La policía inició la investigación en forma inmediata tras la denuncia y encuadró provisionalmente el caso como muerte dudosa, mientras aguarda el resultado de la autopsia, que los forenses llevaron a cabo ayer por la mañana en la morgue judicial.

La víctima fue identificada como Alejandro Fernández, de 33 años, y su cuerpo ya fue entregado a sus familiares para su inhumación. Habría ingresado al Hospital Privado Regional por padecer una presunta pancreatitis, pero sus familiares piden que se investigue una probable negligencia médica, o que se establezca de manera fehaciente la causa de la muerte.

Las sospechas de los denunciantes apuntan también al trabajo que desempeñaba la víctima, quien estaría encargado de recargar matafuegos en un comercio de esta ciudad.