"Traté de despertar a los hinchas..." Eso señaló ayer el volante central de River, Oscar Ahumada, el días después de haber dicho que "cuando San Lorenzo hizo el 2-1 el silencio de los hinchas fue atroz". Traducido: los hinchas "millonarios" no alentaron cuando el equipo lo necesitaba. 24 horas después, su arrebato de honestidad brutal había desaparecido en su discurso.
"El mensaje que quise mandar es que en este momento es cuando más necesitamos de ellos", se explayó Ahumada, luego de la práctica de ayer que River realizó en el predio de Ezeiza. Después de las declaraciones del miércoles al mediodía, además de salir a aclarar la situación por voluntad propia, los dirigentes le recomendaron que rectifique sus dichos.
"Tienen que ponerse en la piel del jugador, duelen mucho algunas cosas que nos dicen, como que el jugador va por la plata. Hace diez años que estoy en el club, quiero al club y mi familia es hincha de River", aseveró. "Los verdaderos hinchas de River me van a entender". "No volvería a decir lo que dije y pido perdón por las formas, quizás no supe expresarme de la mejor manera. No soy escritor, soy jugador de fútbol", se excusó.
Mientras los hinchas se dividían entre quienes apoyaban a Ahumada y quienes pedían que se fuera ya del club, puertas adentro el entrenador Diego Simeone le dio su apoyo manteniéndolo entre los titulares, al menos en la práctica de ayer. "Oscar (Ahumada) es un tipo muy sanguíneo, que tuvo una manera de expresarse y que posteriormente trató de explicarla de la mejor manera. Pidió disculpas y trató de explicar lo que quiso decir", lo defendió el Cholo.
"A mi entender es un jugador importante para el equipo. El ambiente raro lo generamos nosotros a partir de la derrota con San Lorenzo. Algunos aspiran a vernos confundidos, pero nosotros tenemos que mirar para adelante". "Es un tipo que quiere a River y deja todo en cada momento que ha pasado acá en el club", cerró Simeone. Quizás sea titular el domingo, pero el escrache que sufrió al jugador ayer frente a su casa de parte un grupo de hinchas y el repudio oficial de River hacia sus declaraciones indican que su futuro no lo ubica en Núñez.