BUENOS AIRES (DyN).- Los gobernadores de Buenos Aires, Córdoba y Santa Fe recibirán esta semana a los líderes ruralistas en medio de la protesta contra la política sectorial de la Casa Rosada. Los productores, además, buscan sumar al gobernador de Entre Ríos.

Así, las tres provincias agropecuarias más importantes del país dieron una fuerte señal de acercamiento y búsqueda de diálogo, tras la ruptura de la negociación entre el gobierno nacional y las entidades agropecuarias.

El gobernador bonaerense Daniel Scioli se reunirá mañana lunes con dirigentes del campo que están de paro y con intendentes del interior de la provincia de Buenos Aires. Fuentes oficiales confirmaron que el encuentro se llevará a cabo en la Casa de Gobierno provincial con el presidente de Confederaciones Rurales de Buenos Aires y La Pampa (CARBAP), Pedro Apaolaza. Además, entre el lunes y el martes, Scioli mantendrá reuniones con cerca de 100 jefes comunales del interior del distrito, los más afectados por las protestas del sector rural.

El encuentro del gobernador bonaerense se conoció el mismo día en que los ruralistas ratificaron que se reunirán con el mandatario de Córdoba, el peronista Juan Schiaretti, y el de Santa Fe, el socialista Hermes Binner.

Los productores de Entre Ríos, por su parte, cursaron una invitación al gobernador de esa provincia, el peronista Sergio Uribarri, para que participe de una conversación con los ruralistas apostados en la ruta.

En estas horas, el ex gobernador y senador santafesino, Carlos Reutemann, dio su aval a las protestas del campo, al igual que el ex mandatario entrerriano, Jorge Busti, que ayer visitó una asamblea rural.

En contrate con este clima de mediación, el jefe de Gabinete, Alberto Fernández, y el titular de la Federación Agraria Argentina, Eduardo Buzzi, volvieron ayer a protagonizar un cruce mediático, y mientras el ruralista habló de la necesidad de "psicólogos" para los funcionarios nacionales, el ministro le advirtió que él "no" miente ni "tampoco nadie" lo "corre por izquierda".

El episodio se enmarca en las acusaciones mutuas que vienen haciéndose Fernández y Buzzi en los últimos días, desde que el representante del campo salió a decir que el gobierno admitió que fue un error el régimen de retenciones móviles y, tres horas después, el jefe de ministros se encargó de desmentirlo.

Buzzi sostuvo ayer que algunos funcionarios del gobierno "van a necesitar psicólogos" para resolver "las culpas" que les ocasionará su actitud para enfrentar el conflicto con el campo. "Yo tal vez entraría en un ratito de terapia, pero no miento, dígale a Buzzi, ni tampoco nadie me corre por izquierda, dígale a Buzzi, ninguna de las dos cosas", le contestó minutos después el jefe de Gabinete.

El tema se originó el viernes cuando Fernández criticó una vez más las nuevas medidas de fuerza decididas por las entidades del agro y reflexionó que parecía que los ruralistas "se volvieron locos". Por su parte, Buzzi propuso seguir el ejemplo de Bolivia, cuyo presidente Evo Morales está "nacionalizando el petróleo, los recursos naturales".

"Es cierto que a lo mejor en Bolivia tienen fractura, pero es cierto que hay decisiones en América Latina que deberían ser un ejemplo a seguir", indicó.