El ex presidente de Siemens Heinrich von Pierer no será imputado en el presunto caso de corrupción y sobornos que azota a la compañía alemana desde hace más de un año, informó ayer la fiscalía de Munich, encargada del caso.
No hay "suficientes puntos de referencia para (iniciar) un proceso penal relevante", agregó en un comunicado.
En las semanas pasadas aumentó la presión sobre Von Pierer en relación a su presunta implicación en el pago ilegal de comisiones en negro para reavivar un contrato de digitalización de documentos de identidad en Argentina.
El contrato se firmó en 1998 bajo la presidencia de Carlos Menem y fue revocado en 2001 por su sucesor, Fernando de la Rúa.
La fiscalía, sin embargo, precisó que inició una querella contra Von Pierer, que fue presidente de Siemens de 1992 a 2005 y titular del consejo de vigilancia de la empresa del 2005 al 2007, y contra otros miembros de la junta directiva y del consejo de vigilancia del grupo, por incumplimiento de sus funciones.
La fiscalía señaló que para ello se apoyó en la denominada "Ley de Contravenciones administrativas", según la cual, la empresa debe tomar "todas las medidas razonables e implementables que sean necesarias" para "impedir la comisión de delitos".
Varios medios alemanes afirmaron que Von Pierer fue comprometido por un nuevo testigo y ex ejecutivo de Siemens. Él sería el tercero en hacerlo. La persona, cuya identidad no fue divulgada, confirmó la semana pasada ante la fiscalía en Munich que Von Pierer tuvo conocimiento y ordenó el pago de sobornos a funcionarios argentinos, según señalaron el periódico "Süddeutsche Zeitung" y el portal del semanario "Der Spiegel".
Siemens acogió con satisfacción la investigación de la fiscalía y aseguró que cooperará con sus autoridades para detectar cualquier tipo de irregularidad o infracción en la empresa. Se seguirán estudiando todas las medidas posibles para "proteger los intereses de la empresa, también frente a terceros. (DPA)