LA PLATA (DyN)- Después de purgar 13 años por haber asesinado en 1992 a su familia, el dentista Ricardo Barreda fue notificado ayer personalmente por la Justicia de que podrá gozar de la prisión domiciliaria, probablemente a partir de la semana próxima, si cumple algunos requisitos.
Barreda salió con custodia a la mañana temprano de la cárcel de Gorina en la que cumple su condena a prisión perpetua, unos 15 kilómetros al sur de La Plata, y fue trasladado a la alcaidía de los tribunales ubicados en calles 8 y 57.
Alrededor del mediodía, la Cámara Penal notificó a Barreda y a su abogado, Eduardo Gutiérrez, de la resolución favorable al pedido de prisión domiciliaria solicitada por el dentista, alegando que supera en tres años el límite de 70 años que impone la ley para disfrutar de ese beneficio.
Luego, Barreda y el letrado propusieron a los jueces "varios" lugares a los que el dentista podría ir a vivir, algunos de ellos en la capital y otros en el interior de la provincia de Buenos Aires.
El presidente del tribunal, Pedro Soria, comentó al periodismo que uno de esos domicilios pertenece a "una señorita", la novia de Barreda, ubicado en la calle porteña Vidal al 2.300, del barrio de Belgrano.
Ahora resta que el tribunal encargue a los peritos un informe ambiental sobre cada uno de esos sitios y, según los resultados, los jueces escogerán uno de ellos como prisión domiciliaria de Barreda.
También falta el informe psicológico que emitió el Servicio Penitenciario Bonaerense, pero las fuentes descartan que dará positivo.
La salida de la cárcel se concretaría "en una semana" o algunos días más, según consideró su abogado defensor.
En tanto Eduardo Hortel, presidente del tribunal que en 1995 condenó a prisión perpetua a Barreda por el múltiple homicidio, advirtió que si le conceden la prisión domiciliaria "se viola el principio de igualdad" ya que "hay personas en la misma situación (que Barreda) y no están en prisión domiciliaria", afirmó.