El deporte regional tiene desde ayer tres representantes en los Juegos Olímpicos de Beijing. El primero fue el atleta sanmartiniense Javier Carriqueo. Ahora, se sumaron dos yudocas, la neuquina Lorena Briceño y el viedmense Diego Rosatti.
Los pasaportes lo consiguieron en el Panamericano que se disputa en el "James L. Knight Center", de Miami.
Rosatti, de gran actuación en los dos torneos previos, llegó a Miami necesitando un quinto puesto en la categoría de hasta 90 kilos.
El viedmense arribó a la final. Perdió con el brasileño Eduardo Santos, pero su objetivo estaba cumplido, convirtiéndose en el primer rionegrino que logró una plaza para Beijing. El otro que está cerca es el remero barilochense Joaquín Iwan.
Briceño, en 78 kilos, consiguió la última plaza al derrotar por ippon a la local Katie Mocco.
La neuquina cumplió su sueño olímpico después de quedar relegada en Sydney 2000 y Atenas 2004.
En esta categoría el oro fue para la cubana Yurisel Laborde y la presea de plata para la brasileña Edinanci Silva, aunque no hubo pelea ya que la 'carioca' se lesionó y le cedió el título a su rival.
Briceño, quien con el oro conseguido en abril último en el Preolímpico que se disputó en el CENARD había sumado 11 importantes puntos para ganarse la última plaza americana, necesitaba hacer podio en el torneo de Miami, para asegurarse la clasificación, algo que consiguió con una gran definición.
A la alegría de Briceño hay que agregar la presea de bronce que sumó ayer Martín Bustamante en la categoría hasta 55 kilos. El neuquino no entraba en la disputa por plazas olímpicas porque esa categoría no compite en los juegos.