SAN CARLOS DE BARILOCHE (AB).- Después de 48 años esta ciudad volvió a estar cubierta con una fina capa de ceniza. Ayer se acumuló apenas un milímetro mientras que en 1960, la ceniza caída, proveniente del volcán chileno Villarrica, superó los 5 centímetros.

La ceniza había comenzado a caer en la noche del miércoles y la precipitación duró unas tres horas. Pese a ello, apenas pintó el suelo y no hubo mayores inconvenientes. Los automóviles circulaban con capas grises y también muchos vecinos salieron a la calle con barbijos, los cuales se agotaron en la mayoría de las farmacias.

Desde Defensa Civil se informó a la población que la ceniza no era tóxica y, como ya es habitual ante cualquier tipo de fenómeno climático imprevisto, la mayoría de los colegios suspendieron sus clases. Durante todo el día el cielo estuvo despejado, con temperatura agradable y casi nada de viento.

En horas del mediodía arribó el vicepresidente Julio Cobos, desde las localidades de Esquel y El Bolsón, y mantuvo una reunión con el intendente local, Darío Barriga. La reunión se llevó a cabo en el Centro Cívico y allí Cobos prometió ayuda en caso de que la ceniza complique las cosas en esta ciudad. El funcionario se mostró preocupado por el desarrollo de los acontecimientos y dijo que "la actividad del volcán puede durar un par de días, pero también meses".

Cobos se reunió con el ministro de Defensa de Chile, José Goñi, quien le transmitió el agradecimiento por la "ayuda y la enorme solidaridad del pueblo y el gobierno argentino desde que se desató la tragedia", de la erupción en Chaitén.

Agua potable, combustible y una planta potabilizadora de agua, figuran en la lista de ayuda remitida desde Argentina, mientras que por otra parte, se ha recibido y alojado en Esquel a numerosos evacuados de Futaleufú y Chaitén.

Goñi destacó en varios pasajes de la conferencia de prensa la buena relación entre ambos países, y aseguró que en el futuro continuará "el intercambio de información", al tiempo que comenzarán a estudiarse alternativas de recuperación medio ambiental de las zonas afectadas.