NEUQUÉN (AN).- La Defensoría del Niño y el Adolescente está otra vez colapsada, con su dotación de funcionarias reducida a la mitad y recién hoy enviarían un refuerzo para hacer frente a la acumulación de expedientes. Como solución de fondo pero a más largo plazo, el Tribunal Superior de Justicia le pedirá al Consejo de la Magistratura que agilice la selección de más adjuntas y de dos nuevas defensoras titulares.

La crítica situación que atraviesa el organismo fue revelada por su titular, Nara Osés, en una carta que le envió al presidente del TSJ, Ricardo Kohon. Allí le pide "en cumplimiento de las previsiones constitucionales de garantización de los derechos de niños, niñas y adolescentes" que "de modo urgente se designen defensores ad hoc, con la formación necesaria y en la cantidad que la secretaría de Gestión Humana considere pertinente".

Ayer al mediodía el defensor del Tribunal Superior, Alejandro Gavernet, dijo a la radio LU5 que "la situación está siendo contemplada" y hoy asumirá una funcionaria "para tratar de superar el atraso".

A criterio de Osés, que anoche dialogó con "Río Negro", designar una nueva funcionaria "es insuficiente para afrontar un atraso de 400 expedientes". En la carta que le envió a Kohon la defensora aclara que el 8 de abril "advertí a mis superiores jerárquicos" que se estaba produciendo unas preocupante acumulación de expedientes.

El problema comenzó con la baja de dos defensoras adjuntas, una con licencia por razones de salud y la otra trasladada sin pedirle opinión a la titular. Ninguna fue reemplazada "por otro profesional con similar capacitación". Quedaron sólo la titular y una adjunta.

Osés describe el panorama: "La Defensoría ejerce el rol de Ministerio Pupilar en la primera y segunda instancia de los juzgados de familia, civiles, penales y laborales. Su inferioridad de recursos humanos respecto a la de los juzgados de Familia es notoria desde el año 2006: en los juzgados trabajan cuatro jueces, y cada juzgado cuenta con una secretaria y dos prosecretarios. La solución encontrada por el Tribunal Superior de Justicia frente a esta disparidad que dificulta la tarea, fue proponer a la Legislatura la creación de dos nuevas defensorías de los derechos del niño. Esa propuesta, que ya es ley provincial, ocurrió tras un cambio legislativo del procedimiento de la ley 2.302 resuelto por la Cámara Civil, y avalado durante cinco meses por el TSJ, que originara un colapso en la atención de los derechos de la infancia. Llegamos a un atraso en la respuesta de las vistas a más de mil expedientes".

Ahora, según sus registros "el 28 de marzo del 2008 el atraso en la contestación de vistas de los expedientes de los juzgados ascendía a 260" y "el 28 de abril la cantidad de expedientes atrasados superó los 400". Gavernet, en tanto, señaló que conocía los problemas y "todo se fue resolviendo coyunturalmente".