LAMARQUE (AVM).- Lamarque es junto con Chimpay, la localidad que más ha crecido en cantidad de habitantes durante los últimos años en la comarca. Pero este crecimiento no siempre ha estado acompañado por un aumento en los servicios o las ofertas de desarrollo para los vecinos.

Si bien este crecimiento ha estado atado a la producción, sobre todo porque muchos de los nuevos vecinos llegan para trabajar en empresas productoras de frutas, sin dudas se deben comenzar a analizar y poner en marcha alternativas de desarrollo.

Hasta hace tiempo atrás uno de estos puntos fue, sin dudas, el plano cultural, que la actual gestión ha continuado. Pero este aspecto para florecer debe estar sujeto a las mejoras en la calidad de vida de centenas de personas. Y este mejoramiento no está únicamente vinculado a la posibilidad de acceder a una vivienda propia y contar con los servicios esenciales, sino y también a tener oportunidades educativas, recreativas y culturales.

La comarca se encuentra inmersa en un proceso histórico poco común como es la creación y llegada de una universidad nacional. Y allí Lamarque no puede quedar al margen. Porque si, como se especula, la producción en Valle Medio lejos esta aún de alcanzar su techo y se ensayan y perfeccionan nuevos cultivos constantemente, esto va a seguir alimentando el crecimiento poblacional y las ciudades deberán estar preparadas para ello.

Hasta ahora, una de las principales falencias de algunas de las comunas de la comarca ha sido la de trabajar en los problemas inmediatos y cotidianos sin levantar la frente y mirar al futuro.

Hoy, por caso, mientras se inicien los festejos no serán pocos los vecinos que mirarán a la localidad con los ojos de sus hijos, como aquellos que miran el horizonte a la espera de la llegada de alguien.

Existen momentos fundacionales en la vida los pueblos. Y sin dudas la comarca a traviesa uno de ellos: la posibilidad de ampliar las fronteras de la producción, de hacer hincapié en el desarrollo cultural -con la explotación de recursos tan importantes como en el caso de Lamarque de fósiles únicos y su patrimonio-, y poder contar con un polo educativo universitario son sin dudas herramientas que desde la ciudad no pueden ser dejadas de lado para repensar el desarrollo futuro.