La lluvia de cenizas del volcán chileno Chaitén comenzaba a causar daños económicos en la ganadería, los cultivos y el turismo.
El gobernador de Chubut, Mario Das Neves, advirtió que las cenizas "afectan al 60% del distrito y dos millones de los 4,7 millones de animales con que cuenta la región también sufrieron daños".
El polvillo volvió a caer sobre la ciudad de Esquel, pero las escuelas se mantuvieron abiertas y la población volvió a protegerse con tapabocas.
Das Neves solicitará ayuda al gobierno federal con el objetivo de instrumentar un plan de recuperación del campo en su provincia, en momentos en que las autoridades reportaban más actividad eruptiva en el volcán.
Los trastornos por las partículas volvieron a impactar en la aeronavegación comercial y en el aeropuerto internacional de Ezeiza, las empresas American y United Airlines suspendieron vuelos hacia Miami, Nueva York, Chicago y Dallas.
Los vuelos de cabotaje que partían desde el aeroparque metropolitano de Buenos Aires hacia la Patagonia (región sur) estaban operando con normalidad, a excepción de los que vinculan con la ciudad de Esquel, a 2.000 Km al sudoeste, cuyo aeropuerto se encuentra cerrado.
Unas 450 personas han sido atendidas esta semana en Chubut por sufrir distintas afecciones respiratorias, dijo una fuente hospitalaria.
Las cenizas del volcán Chaitén habían quedado desde el jueves en suspensión sobre Buenos Aires, pero a gran altura, sin afectar a la población, después de atravesar unos 2.000 km desde territorio chileno.
El SMN dijo que el polvillo había alcanzado el cielo de las Islas Malvinas, aunque la concentración era baja y a tanta altura que no afectaba la vida en el archipiélago.
Fuente: AFP.