Los aumentos en las escuelas privadas volvieron en Capital y Gran Buenos Aires y van de entre el 10 y el 45%. Así lo consigna un informe publicado ayer en "Clarín".

Tales incrementos se dan en colegios con o sin subvención. La llamada "cuota recupero" para compensar el aumento salarial docente impacta en el bolsillo de las familias en pleno desarrollo del ciclo lectivo, sin posibilidades de optar por otras ofertas.

Se insinúa que esta situación se dará también en nuestra región.

El artículo señala que las facturas de las escuelas discriminan entre varios conceptos: aranceles (programáticos y extracurriculares) por un lado, y cuota recupero o compensación de mayores costos laborales por otro. "Pero para el bolsillo de los padres es un solo número".

Recuerda el informe que este es el tercer año que se aplica el sistema de la "cuota recupero". Comenzó a cobrarse en todo el país a mediados de diciembre de 2006. Desde entonces, las entidades de defensa del consumidor denuncian algunas subas desproporcionadas.

Se trata de un mecanismo arancelario acordado entre la Secretaría de Comercio Interior y las asociaciones que agrupan a las instituciones de educación privada. El valor lo define el colegio según sus costos: gastos salariales, cantidad de alumnos y becados, porcentaje de subvención. Tal cuota fue pensada para que las escuelas afronten los aumentos docentes sin "tocar" las cuotas, un artilugio que permitió que los incrementos no lleguen a los índices de la inflación.

El director de Educación de Gestión Privada bonaerense, Néstor Ribet, aseguró que la cuota recupero "correctamente aplicada y bien explicada" no debería causar problemas. Distinta opinión es la de su par porteño, Enrique Palmeyro, que señala que la cuota recupero "es confusa y no despierta confianza entre los padres, por lo que opina que "hay que reflotar la Comisión de Aranceles". (Clarín)