VIEDMA / BARILOCHE (AV / AB)- Un matrimonio viedmense que se dirigía con urgencia a un sanatorio fue asaltado en el camino. A punta de pistola dos jóvenes dejaron a pie a la pareja y huyeron raudamente en su moderno automóvil.

Según se supo, una descompostura de la mujer que no cesaba generó que su esposo la llevara en busca de atención médica a uno de los centros privados de esta capital. Ya en camino y cuando faltaban apenas un par de cuadras para llegar al sanatorio -en pleno centro viedmense- la mujer pidió a su es

poso que detuviera la marcha ante la incontrolable descompensación. Bastaron apenas unos segundos para que dos desconocidos se aproximaran rápidamente al vehículo y apuntando con una pistola al conductor lo obligaron a descender junto con su esposa, para quien la descompostura se vio agravada por la violenta situación. Junto con el vehículo los delincuentes se alzaron con la billetera del conductor, que además de la documentación guardaba unos 500 pesos.

Según trascendió, el propietario del Volkswagen Cross Fox patente FIK041 -cuyo apellido sería Wolf- es un policía federal retirado de 64 años, dedicado en la actualidad al rubro pinturería.

El asalto se produjo pasadas la 1:30 de ayer en la céntrica Irigoyen entre Guido y Mitre. La búsqueda del auto y de los delincuentes continuó durante toda la víspera, pero hasta la tarde no había resultados.

En Bariloche no tuvieron la misma suerte

Por otra parte, durante la madrugada del viernes desconocidos intentaron robar un auto que se encontraba estacionado en pleno centro de Bariloche. El vehículo llegó a ser puesto en marcha y rodó unos 60 metros, pero terminó estrellado frente a un local comercial. Los delincuentes, huyeron.

El Chevrolet Corsa blanco, dominio FPN 804, estaba en Quaglia 285, entre Moreno y Mitre, a una cuadra del Centro Cívico. Al menos dos personas habrían abierto las puertas y lograron poner en marcha el vehículo. No obstante, por estar trabada su dirección, se subieron a la vereda en Mitre y Quaglia e impactaron contra el lateral de una boutique con ropa de niños, rompiendo un ventilete de gas. Como consecuencia, destrozaron la rueda delantera derecha del Corsa, el farol y también su lateral.