SAN MARTÍN DE LOS ANDES (ASM)- En una seguidilla de atracos a mano armada que conmovió ayer a esta ciudad, un sujeto con la cara descubierta y a la luz del día asaltó un lubricentro; dos individuos despojaron a un ciudadano brasileño en pleno casco histórico de la ciudad, y una mujer vivió momentos de angustia al encontrarse con un ladrón en su casa.
La Policía mantenía operativos de control y búsqueda en toda la región, aunque no se habían producido detenciones.
El último de los hechos ocurrió alrededor del mediodía, cuando un individuo de unos 40 años y bien vestido, ingresó al lubricentro de avenida Koessler al 1.540. En ese momento se hallaba un despachante del lugar, quien atendió al sujeto como un cliente más.
El hombre pidió precio de unos aceites y, cuando el hombre se dio vuelta para buscar las listas, el malviviente se abalanzó sobre él, lo golpeó para reducirlo, le ató las manos con precintos plásticos y extrajo un arma con la que le exigió dinero. Le robó unos 400 pesos, que el despachante llevaba en el bolsillo de la camisa, pero justo en ese momento apareció otro empleado, que al ver a su compañero en el suelo pensó a primera vista que había sufrido algún tipo de descompensación. Cuando se hincó para atenderlo, el atacante procedió de la misma manera, golpeándolo y atándolo, para darse a la fuga.
Horas antes de aquel episodio, un ciudadano brasileño, de reciente radicación en esta ciudad, fue abordado por dos sujetos en pleno centro, quienes, cuchillos en mano, lo despojaron de sus pertenencias.
Ocurrió alrededor de las cuatro de la madrugada de ayer, cuando un hombre retornaba a su hogar transitando a pie por avenida San Martín a la altura de calle Pérez. Allí, dos individuos a cara descubierta le salieron al cruce y uno de ellos le puso un cuchillo en el cuello y le exigió dinero. La víctima, de nacionalidad brasileña pero radicada en San Martín desde hace unos tres meses, según trascendió, les entregó todo cuanto llevaba consigo. Fue despojado de unos 150 pesos y objetos de uso personal.
Casi al mismo tiempo, en un hecho sin aparente conexión, una mujer vivió momentos de angustia cuando se despertó en su domicilio de avenida San Martín casi esquina Rohde, alertada por extraños ruidos. Al acudir a la cocina se encontró con un desconocido, que había ingresado a la vivienda con fines de robo. Al verse sorprendido, el hombre amenazó con golpearla a ella y a sus hijos, y le exigió dinero. Huyó con unos 2.800 pesos, que era todo cuanto había en la casa.
