Luego de dos jornadas cargadas de rumores sobre la, finalmente desmentida, renuncia del jefe de Gabinete, Alberto Fernández, el gobierno busca ahora avanzar en el "acuerdo del Bicentenario" que lanzará la presidenta Cristina Fernández el 25 de mayo próximo.
Las versiones sobre la salida de Fernández se incrementaron el miércoles en medio de las difíciles negociaciones con el sector agropecuario hasta que el propio funcionario salió a asegurar su continuidad y calificó esos rumores como "un total disparate" que atribuyó a "quienes intentan complicar" un entendimiento con el campo.
Para reforzar esta confirmación, el titular del bloque de diputados del kirchnerismo, Agustín Rossi, sostuvo que esas especies fueron "sólo una anécdota de un rumor", al tiempo que estimó que se llegará a una solución "en términos positivos" con el agro. Rossi defendió a Fernández porque el miércoles "estuvo trabajando durante todo el día llevando adelante las negociaciones con el campo y después asistió a cumplir con sus compromisos en el Senado", donde informó sobre su gestión.
El miércoles, Alberto Fernández manifestó la importancia de que "el campo también esté incluido en el acuerdo del Bicentenario" que la jefa del Estado lanzará el 25 de mayo donde, se presume, habrá una batería de medidas económicas consensuadas con sectores del empresariado nacional y de los trabajadores para atacar la inflación, entre otros puntos.
Según supo la agencia DyN, el jefe de Gabinete
había puesto su renuncia a disposición de la presidenta, pero ésta no la aceptó, a la espera de que el funcionario coordinador resuelva el conflicto con los sectores del agro, que ayer volvió a recalentarse.
Además de desmentir su renuncia, Fernández aseguró que mantiene una excelente relación con la jefa de Estado y con su antecesor, Néstor Kirchner, a quien algunas versiones atribuyeron el eventual impulso de su alejamiento. "Hablé tres veces esta mañana con la presidenta y también ayer, para ver cuáles son las cosas" que faltaban definir para cerrar un acuerdo con el campo, dijo Fernández, y consideró "todo un delirio, todo un enorme disparate", las versiones acerca de un distanciamiento suyo con Néstor Kirchner quien le atribuyen fuerte influencia en las decisiones del gobierno nacional. (DyN)