Un sobreviviente de la dictadura, Juan Evaristo Puthod, dado por desaparecido hoy, se presentó esta noche por sus propios medios pero "muy golpeado", en una remisería de la ciudad bonaerense de Zárate, y fue trasladado a una clínica privada, informaron militantes de DD.HH. y voceros policiales.

Puthod, quien dijo haber sido "secuestrado" según indicaron esta noche militantes de DD.HH., se había convertido en la mayor preocupación de las autoridades y los organismos, que buscaban intensamente algún rastro de quien es jefe de la Casa de la Memoria de la ciudad bonaerense de Zárate, 80 kilómetros al norte de Capital Federal.

Puthod se presentó esta noche, poco antes de las 23, en una remisería ubicada en la esquina de Larrea y Justa Lima, de Zárate, a unas 20 cuadras de la Casa de la Memoria de Zárate, informaron voceros policiales.

Las autoridades dijeron a DyN que "hasta que no hablemos con él, no podemos decir nada, aparentemente lo secuestraron, pero tiene que actuar la justicia". Puthod fue llevado a la clínica privada Virgen del Carmen "lastimado", dijeron militantes de derechos humanos, quienes hablaron por teléfono con él y su esposa Graciela Draguisevich.

En el momento de su aparición, Puthod se hallaba "golpeado, sobre todo en el pómulo izquierdo", indicó Guillermo, un militante de la Casa de la Memoria de Zárate, quien confirmó que el hombre estuvo "secuestrado". "Tenía golpes, marcas en la cara, golpeado sobre todo en el pómulo izquierdo y cansado, pero entero de ánimo", dijo Guillermo a TN.

Incluso, Guillermo mostró una foto sacada esta misma noche con el pómulo izquierdo de Puthod inflamado. Además, el militante confirmó que Puthod "fue secuestrado, de eso no caben dudas". Puthod, de 50 años y padre de cuatro hijos, fue visto por última vez ayer a las 18.45 vestido con una campera verde, jean gastado, buzo celeste y calzado marrón, cuando salió de la Casa de la Memoria para dirigirse hacia la radio donde tiene un programa de derechos humanos.

El hombre nunca llegó a su destino: al principio la esposa de Puthod, Graciela Draguisevich, pensó que su marido había tenido algún problema de salud por sus antecedentes diabéticos y cardíacos, pero con el correr de las horas apareció el fantasma del albañil Jorge Julio López, el testigo del juicio contra el represor Miguel Etchecolatz que está desaparecido desde el 18 de setiembre de 2006.

Puthod había denunciado judicialmente amenazas desde hacía un año y medio y estaba organizando para el 16 de mayo un acto de homenaje a los montoneros rosarinos Osvaldo Cambiasso y Eduardo Pereyra Rossi, cuyas muertes, poco antes del retorno de la democracia en 1983, se le adjudican a Luis Patti, el diputado que fue nuevamente encarcelado esta semana por crímenes ocurridos en el marco del Primer Cuerpo del Ejército. "Queremos que no quede ninguna duda de que Patti no es un preso político, sino un asesino y genocida", decía Puthod hace unos días en el marco de la organización del evento.

Esta noche, el gobernador bonaerense, Daniel Scioli, y el ministro de Seguridad provincial, Carlos Stornelli, fueron a Zárate para reunirse con la esposa de Puthod en la Casa de la Memoria. Puthod estuvo seis años secuestrado: cayó en manos de la Prefectura dos días después del golpe militar del 26 de marzo de 1976, recorrió siete centros clandestinos, sufrió torturas hasta en el día de su cumpleaños número 18, pasó una noche encerrado en un ataúd y hasta perdió un ojo por los tormentos que sufrió durante su cautiverio.

La noticia de su desaparición sacudió esta mañana a las autoridades nacionales y provinciales, que desplegaron un gran operativo en la zona de Zárate, con unos 300 efectivos, la división Canes y seis helicópteros. Incluso, el ministro Stornelli estuvo en Zárate reunido con los investigadores y el fiscal Martín Zocca, quien caratuló el caso como "averiguación de paradero".

Zocca realizó esta tarde un operativo, poco después de esa reunión, en una vivienda ubicada a la vuelta de la sede de la Casa de la Memoria de Zárate, porque los perros que hacen rastrillajes habían mostrado una actitud extraña en el lugar. Pero en la vivienda abandonada no se encontró ninguna huella del nuevo desaparecido. Por su parte, el gobernador Scioli hizo público el compromiso de su administración para encontrarlo.

Un rato después, desde Santa Cruz, la presidenta Cristina Fernández de Kirchner interrumpió su discurso en un acto para expresar que "estamos muy preocupados" porque "ha desaparecido un testigo clave en juicios por los derechos humanos", y abogó porque "sea algo momentáneo".

Esta noche, familiares, amigos y militantes de derechos humanos marcharon en Zárate para reclamar por la aparición inmediata del ex preso político, quien es querellante y testigo en la causa 5310 promovida por la Secretaría de Derechos Humanos bonaerense, luego del hallazgo de restos óseos humanos en el Tiro Federal de Zárate.

En tanto, la secretaria de Derechos Humanos bonaerense, Sara Derothier de Cobacho, admitió la posibilidad de que "resabios de la dictadura" estén detrás del hecho. Cobacho dijo por radio La Red que a Puthod "se le perdió el rastro a la mitad de cuadra del lugar del que salió".

El empresario Esteban Reynal, quien ofició como vocero de Patti, fue consultado también por La Red y, tras defender al ex comisario, advirtió que "se van a quemar con el chocolate que menciona la señora, igual que con el caso de (Luis) Gerez".

Así se refirió al ex preso político que denunció haber sido secuestrado tres meses después que López, en un episodio en el que también hubo denuncias que involucraron a Patti pero que finalmente mostró puntos dudosos que la Justicia todavía trata de esclarecer.

DyN y Télam