GUALEGUAYCHÚ.- Miles de argentinos se movilizaron ayer hacia el puente internacional que comunica con el Uruguay, en la cuarta marcha contra la fábrica de celulosa Botnia, a la que rechazan por considerar que contaminará.
Unas 80.000 personas participaron -bajo una intensa lluvia- de la denominada "Marcha por la Vida", según voceros de los organizadores. Respondieron a la convocatoria fundamentalmente ambientalistas y vecinos de Gualeguaychú.
"Es un día de felicidad, porque es un día de lucha contra Botnia", dijo a la prensa Sira Muñoz en Arroyo Verde, el paraje sobre la ruta 136 que conduce al puente binacional y donde se realiza un bloqueo ininterrumpido desde noviembre del 2006, que obstaculiza el tránsito entre ambos países.
En esta movilización -la primera desde que la fábrica se encuentra funcionando- participaron además delegaciones de otras localidades de Entre Ríos, de Capital Federal y de otros puntos del país.
Muchos vecinos se movilizaron en sus automóviles y otros a bordo de micros que partieron desde la ciudad con el apoyo de la Asamblea Ciudadana Ambiental de Gualeguaychú, la Municipalidad y algunas empresas de transporte privado.
El acto comenzó con una oración ecuménica que reunió al obispo católico local, monseñor Jorge Lozano y representantes de la iglesia protestante y musulmana, sobre la ruta 136. Posteriormente, se cantaron los himnos argentino y uruguayo "como símbolo de la hermandad entre los pueblos" y se leyó una proclama. En el documento, se denunció a Botnia y a Finlandia porque "amparándose en la bandera del progreso instalaron una empresa que es pan para hoy y desidia muerte y destrucción para mañana". (AFP)