El papa Benedicto XVI, de 81 años, está bien de salud, afirmó ayer el portavoz vaticano, Federico Lombardi, que salió así al paso de las informaciones aparecidas en un diario francés sobre un supuesto deterioro físico del Pontífice.
Según Le Figaro, Benedicto XVI aparece "cansado" desde su viaje a EE UU, "no es un secreto para nadie la fragilidad de su corazón" y su estado de salud "alimenta ya los rumores sobre la sucesión".
Le Figaro afirma que desde hace un tiempo ha reducido el número de audiencias, que el Viernes Santo pasado renunció a seguir a pie el Vía Crucis en el Coliseo de Roma, que en varias ocasiones no ha leído los discursos previstos y que, tras el viaje a EE UU, se suspendió la audiencia pública de los miércoles.
El diario francés señaló que el pontífice redujo su actividad en cuanto a viajes y compromisos porque estaría cansado y delicado de salud, por lo que hay rumores sobre su posible sucesión.
El artículo titulado "La salud del Papa alimenta ya rumores de sucesión", señala que su reducción de actividades es tan drástica que sólo asistió a la parte conclusiva del funeral del cardenal colombiano Alfonso López Trujillo.
El Santo Padre, de 81 años cumplidos "sube y baja las escaleras, está todavía ágil, pero tiene la edad de sus arterias y, no es un secreto para nadie, es frágil de corazón".
El portavoz vaticano aseguró que esas afirmaciones "son paradójicas, teniendo en cuenta que el Pontífice ha regresado de un viaje, largo y fatigoso, en el que ha cumplido de manera brillante todos los compromiso sin dar la más mínima señal de incertidumbre y son modificar el programa".
Lombardi subrayó que Benedicto XVI, que acaba de cumplir 81 años, "está bien, y como se puede ver por televisión, cumple con todos los compromisos".
Respecto de la suspensión de la audiencia del pasado día 23, dos días después de regresar del viaje de siete días por Estados Unidos, Lombardi explicó que era algo previsto con anterioridad. El jesuita Lombardi agregó que el Papa sigue con su agenda normal. Ayer, el pontífice ordenó a 29 sacerdotes en el Vaticano y, a mediados de mayo, viajará al sur de Italia.