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La Barda del Ñireco es ahora área "daño temido" | ||
Es por el riesgo geológico que puede afectar a las casas | ||
SAN CARLOS DE BARILOCHE (AB).- El intendente Darío Barriga declaró a la Barda del arroyo Ñireco como área de "daño temido", debido al riesgo geológico del lugar y la emergencia permanente que afecta a las familias allí asentadas. La resolución también promueve la adopción de "todas las medidas necesarias para lograr una solución definitiva a los problemas ambientales existentes". Pero en los hechos, los pobladores siguen a la espera del prometido traslado a casas más seguras o bien de las obras de apuntalamiento y consolidación que permitan asegurar la habitabilidad de los sectores menos críticos. Hace casi dos años el municipio compró 17 hectáreas para construir las casas destinadas a las familias de la Barda, pero las obras todavía no comenzaron. La figura del "daño temido" está contemplada en el artículo 175 de la Carta Orgánica Municipal para ser aplicada ante actividades que generan un perjuicio ambiental y que conllevan de por sí "la obligación de recomponer e indemnizar". Barriga fundó su decisión en un antiguo informe técnico de los geólogos Eduardo Domínguez y Jorge Rabassa donde aparece descripta "la continua erosión del pie del talud" a orillas del Ñireco, que lo hace "potencialmente inestable y no recomendable para futuras urbanizaciones". Aun así, por la crisis habitacional y por la dejadez del municipio, el poblamiento del lugar nunca se detuvo. El enorme riesgo potencial ganó tapas en los diarios en el invierno de 2004, cuando las lluvias produjo deslizamientos de tierra que afectaron varias casas. Otro informe citado en la resolución firmada hace pocos días es el que elaboró el Servicio Geológico Minero Argentino (Segemar), según el cual "la proliferación de asentamientos ha agravado las condiciones geomorfológicas naturales" de la Barda, haciendo "altamente probable que se produzcan movimientos gravitacionales, especialmente deslizamientos". También el Departamento Provincial de Aguas cuenta con diagnósticos alarmantes sobre la amenaza que enfrentan los "asentamientos permanentes" distribuidos sobre la planicie de inundación del Ñireco. Lo que no dice el informe es que esas viviendas no sólo corresponden a ocupantes ilegales o familias sin recursos, sino que también hay barrios del IPPV. Dos vecinas de la Barda consultadas ayer por este diario se mostraron escépticas sobre la real utilidad de la declaración de "daño temido". | ||
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