NEUQUÉN (AN).- La crisis financiera que afecta a la provincia llevó a que Villa El Chocón fuera una de las ciudades más afectadas y la primera en la que los empleados municipales cobran sus sueldos en cuotas. La complicada situación económica obedece a que mientras por mes el municipio percibe 130.000 pesos, los 300 empleados que posee la comuna demandan un gasto de 463.000.

"Lamentablemente estamos pagando los sueldos en dos cuotas, a medida que nos van llegando los fondos que el gobierno provincial nos envía", reconoció ayer el intendente Nicolás Di Fonzo, a la vez que explicó que "a principios de año la provincia nos había dado un refuerzo para poder pagar los sueldos y ahora gestionamos otro más para tratar de evitar esto de pagar en dos cuotas".

Enclavada a 80 kilómetros de la capital, la villa de los dinosaurios cuenta con un poco menos de 1.200 habitantes y la extraordinaria cantidad de 300 empleados municipales, de los cuales 162 corresponden a la planta permanente y 91 fueron recientemente regularizados como contratados.

"El municipio tenía 110 empleados con contratos en negro que nosotros blanqueamos y por eso ahora no nos alcanza la coparticipación para cancelar los sueldos", indicó el jefe comunal, a la vez que señaló que "ya aumentamos algunas tasas y en los próximos días vamos a aumentar otras mediante una nueva ordenanza tarifaria".

El intendente arremetió ayer contra las versiones que indican que estaría a punto de presentar su renuncia y aseguró que "no voy a renunciar, esas versiones son una campaña mediática de desestabilización del gobierno que está haciendo gente que es afiliada al MPN y que el año pasado estuvo en la lista opositora".

Di Fonzo enfatizó que ganó "con casi el 80% de los votos y por las quejas de unos pocos malintencionados no voy a renunciar" y agregó que "para mí este es el mejor gobierno de la provincia porque estamos trabajando con la gente y con un fuerte compromiso en la contención social".

Di Fonzo aseguró que "es lógico que haya heridos de guerra que me critiquen" y explicó que "la villa no está exenta de la realidad económica provincial, pero nosotros estamos apostando a mejorar la calidad de vida de los vecinos y por eso con el blanqueo no sólo conseguimos que esta gente y su familia tengan obra social sino que pasaron de cobrar 500 pesos a 950 y eso es mucho dinero que vuelve a insertarse a la economía de la ciudad".

El endeudamiento del municipio también es preocupante ya que es superior al presupuesto anual. No obstante, Di Fonzo anticipó que "en las próximas semanas vamos a anunciar el inicio del pago a los proveedores a los que se les debe menos de 10.000 pesos", y agregó que "en la localidad no hay enfrentamientos y por eso el viernes expusimos ante los empleados la situación económica del municipio".