BUENOS AIRES (DyN).- La presidenta Cristina Fernández defendió ayer en Ecuador el respeto a la "soberanía" de los países latinoamericanos, y criticó las acciones unilaterales y los "ataques preventivos" que consideró inspirados en "doctrinas" ajenas a América Latina. Remarcó, asimismo, que la soberanía "excede los lazos de amistad" y ratificó la posición "contundente" de la Argentina en la "vigencia irrestricta de la legalidad, la legitimidad y el derecho internacional".
La jefa del Estado habló así en el almuerzo que su par ecuatoriano, Rafael Correa, ofreció en su honor durante la visita oficial de 24 horas a ese país.
Previamente, ambos mandatarios habían firmado acuerdos de cooperación en materia de integración, promoción comercial, de políticas sociales, laboral, de ciencia, de tecnología agropecuaria, de transporte y de actividades espaciales y suscribieron el contrato de inicio de la central hidroeléctrica Coca Codo Sinclair, megaproyecto que demandará una inversión de 1.600 millones de dólares y será realizada por las empresas estatales Enarsa de Argentina y Termopichincha de Ecuador.
Cristina Fernández reafirmó ante Correa la postura sostenida por la Argentina en el Grupo Río luego de la incursión del ejército de Colombia en territorio ecuatoriano para atacar un campamento de las FARC. "En América Latina no puede ni debe ingresar la unilateralidad y el ataque preventivo que tanto ha dañado la seguridad en el mundo", dijo.
Durante el acto de lanzamiento de la represa hidroeléctrica, realizado en la sede del Gobierno en Quito, la presidenta exhortó a aprovechar "nuestras actitudes, virtudes e historias para hacer sinergia latinoamericana, y de allí ayudar a vivir en un mundo mejor, más seguro, justo y equitativo".
"Tenemos el derecho a que se nos escuche, porque durante mucho tiempo, se escucharon otras voces que luego fracasaron y que casualmente en momentos de crisis comienzan a aplicar las recetas que siempre nos prohibieron", afirmó Cristina Fernández. Y a renglón seguido precisó el sentido de su afirmación: en estos "momentos de crisis en los países centrales hay fuerte intervención de los bancos centrales, de los Tesoros, para poder salir de la crisis". También destacó que "la distribución del ingreso es, junto a la necesidad de formulación de proyectos nacionales para poder insertarnos exitosamente en el mundo, las dos grandes batallas que tenemos que dar los latinoamericanos".
"Me parece que estas experiencias que están haciendo los pueblos latinoamericanos requieren también un nuevo relato, y una nueva batalla cultural, que es la que viene ahora, y la que tenemos que dar para lograr la mejor calidad de vida del pueblo", enfatizó la presidenta.
En el transcurso del acto, Correa le entregó a la mandataria la condecoración de la Orden Nacional al mérito, que constituye el máximo reconocimiento que confiere Ecuador y que solo fue entregado en una oportunidad a otra mujer, Eva Perón. A su vez, la mandataria condecoró a su par ecuatoriano con la Orden del Libertador General San Martín.