El gobierno aprovechó ayer los problemas que genera el humo proveniente de la quema de pastizales en el Delta bonaerense para fustigar a los productores agropecuarios, con quienes mantiene una dura disputa por el aumento de los impuestos a las exportaciones de granos.

Ya son más de 70 mil hectáreas las afectadas por el fuego y la densa capa gris se extendió también al Uruguay.

Para intentar calmar el nerviosismo de la población por el problema -que ayer derivó en más accidentes de tránsito y hospitalizaciones por irritación ocular- desde la Rosada se dispuso nuevamente el corte de las rutas 9, 12 y 14 por la falta de visibilidad.

En forma paralela se cancelaron los aterrizajes en el Aeroparque porteño (aunque en forma parcial). Hubo suspensión de servicios de larga distancia en la terminal de ómnibus de Retiro y el cierre del puerto de Zárate ( La Plata no volvió a abrirse desde el miércoles y Buenos Aires podría cerrarse en cualquier momento).

La presidenta Cristina Fernández pidió que actúe la Justicia por el humo y adjudicó esa acción a la "irracionalidad" e "irresponsabilidad" de los que prenden fuego a los pastizales.

Según coincidieron el jefe de Gabinete, Alberto Fernández; los ministros del Interior, Florencio Randazzo, y de Justicia, Aníbal Fernández, y la secretaria de Medio Ambiente, Romina Picolotti, el humo es culpa de "productores rurales que con total irresponsabilidad" queman pastos "sólo para mejorar su rentabilidad".

Como la práctica de la quema de pastizales es muy común en la zona norte de la provincia para permitir el crecimiento de nuevo forraje para los animales, dirigentes ruralistas reaccionaron indignados y con ironía.

La Sociedad Rural de San Pedro le pidió a Randazzo que lo mande al secretario de Comercio, Guillermo Moreno, a que "negocie con el Servicio Meteorológico para que el viento sople del sur y el humo vaya a otro lado".

También la intensa humareda provocó las primeras consecuencias notorias para la salud de la población: hubo pacientes que concurrieron a hospitales oftalmológicos de la Capital por el malestar que sentían en los ojos, entre la noche del miércoles y la madrugada de ayer.

El ministro del Interior, Florencio Randazzo, afirmó que "hay 70 mil hectáreas bajo fuego y 295 focos de incendio" en la zona del Delta, y culpó a los "productores agropecuarios" por la situación, a quienes acusó de quemar pastizales para para renovarlos y evitar afrontar costos más altos. (DyN/R.Central)