NEUQUÉN (AN).- El mundo onírico fue explorado y llevado al lienzo por los pintores surrealistas. Sigmund Freud fue el conquistador del reino de la interpretación de los sueños hace más de cien años.
La necesidad de bucear en el espacio de lo onírico está directamente relacionada con lo humano. De eso habla Luciana Méndez en su unipersonal "Sueño profundo" que estará hoy, a las 21.30, en La Conrado Centro Cultural. Y se repite el próximo viernes.
Luciana es una actriz viajada: rionegrina, se formó en Buenos Aires en danza, tango, clown, acrobacia y otras disciplinas que le dieron un perfil polifacético. Entre sus logros se alzó con el premio Barletta en el rubro Nuevas Tendencias.
En 2003 la muchacha cruzó el océano y se radicó en Italia llevando consigo "Sueño profundo", pieza que había escrito el mismo año. Italia la recibió con el pie derecho. Allí formó pareja, tuvo un hijo y se transformó en el corazón del grupo "Viento ítalo-argentino" que la trae nuevamente por esta ciudad como intérprete de la obra.
Para Luciana los artistas son comunicadores y pueden expresar lo que quieren a otros valiéndose de la escena, del cuerpo y de la voz. Que además pueden hacerlo de "modo estético y bello". Sobre todo bello.
Por eso, con "Sueño profundo" la joven intenta transmitir cuestiones inherentes a las personas como son los deseos, los anhelos. "Son como pinceladas que aparecen en el sueño, de las que cada uno de los espectadores va tomando algo según sus vivencias y experiencias", contó la actriz que personifica a Lemna. Ella es "la dama del sueño" que quiere ser libre y emprende un viaje hacia las profundidades del corazón. Hacia el interior de sí misma.
En ese recorrido Lemna adopta diferentes roles y se encuentra con distintas estructuras propias del sistema al que pertenece. "Esto hace que la obra sea intensa en todo sentido: te moviliza como espectador y a la vez tiene mucho ritmo, mucha energía", dijo Luciana.
De escenografía básica, la pieza se nutre fundamentalmente con el trabajo físico actoral, el texto poético y la expresión corporal. Porque tiene mucho movimiento, fiel a ese "teatro físico" al que Luciana le pone el cuerpo cada vez que sale a escena.
- ¿Qué le va a pasar con tus sueños al espectador?
- Se va a sorprender y lo va a movilizar, ya sea porque le impacta a nivel visual o por la energía. O porque lo impacta su mundo interior. Es como un espejo donde mirarse.
