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Vialidad culpa a la falta de trenes por el colapso vial | ||
Las obras para mejorar las rutas demoran más que las necesidades de los usuarios. "El crecimiento vehicular marcha mucho más rápido que las obras viales", reconoció. | ||
SAN ANTONIO OESTE (Especial)- El administrador de Vialidad Nacional, Nelson Periotti, sostuvo que "el colapso de la red vial está fundamentalmente relacionado con el déficit ferroviario". En la visita que realizó a esta localidad, el funcionario afirmó que "en el transcurso de estos cinco años hemos realizado diferentes inversiones, que no generan cambios radicales porque hay problemas de fondo que resolver". Periotti opinó qué "hoy el 93% de las cargas que se realizan en la Argentina se movilizan por las rutas, porque el ferrocarril ya no compite con los grandes envíos y todo va al camino. Por eso es necesario hacer un reordenamiento, ya que tanto en las grandes urbes como en las rutas del interior esto genera una saturación que incide en la cantidad de accidentes, además de volver imposible las labores de mantenimiento de obras que siempre son costosas". Se manifestó "un defensor de generar acciones para que el ferrocarril rápidamente recupere las posibilidades de transporte, porque de esta manera estamos defendiendo las infraestructuras que construimos". Para ilustrar la "saturación vehicular" Periotti explicó qué "la autopista Panamericana de ingreso a la ciudad de Buenos Aires, por caso, tiene un tránsito medio diario anual de 400 mil vehículos. Actualmente entran a la ciudad 1.200.000 vehículos diarios, pero además la cantidad de rodados que se van incorporando es determinante, ya que el año pasado se sumaron algo así como 400 mil vehículos livianos y 25 mil camiones, más allá del transporte de pasajeros". "Con estos números evidentemente la estructura urbana está colapsada y merece un reordenamiento del tránsito en todo sentido, ya que las obras contribuyen y mucho a resolver el problema, pero el crecimiento de la flota vehicular, marcha mucho más rápido que las obras viales, debido a que una obra de transformación en autovía, por ejemplo, nos insume de 30 a 36 meses. Lo mismo ocurre con las rutas del interior, ya que cuando llegan obras largamente esperadas, el gran movimiento que generan cambian el ritmo de vida de las pequeñas poblaciones, y estos avances también se convierten en problemas si no logramos resolver esos inconvenientes de fondo". Periotti considera que no existe una estrecha vincula ción entre el estado de las rutas y los accidentes de tránsito, ya qué "los organismos gubernamentales y no gubernamentales que trabajan en accidentología vial determinaron fehacientemente que estas infraestructuras sólo inciden en los accidentes en un 5%. El resto se divide fundamentalmente entre el conductor, y en sólo un pequeño porcentaje en fallas del vehículo, pero en general la responsabilidad de los accidentes está en quien opera los móviles, aunque la seguridad vial sin lugar a dudas colabora para minimizar los riesgos de accidentes". El funcionario, sin embargo, recalcó qué "el caos en el tránsito es una de las causas de los grandes índices de accidentes que manejamos. Por eso tratar de liberar a las rutas del tránsito pesado, devolviéndole su competitividad al ferrocarril, es una de las salidas más relevantes para solucionar el tema". | ||
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