NEUQUÉN (AN).- El remodelado museo mineralógico y paleontológico "Juan Augusto Olsacher" de Zapala está próximo a reabrir sus puertas pero en el exterior en vez de la clásica laja zapalina luce piedras traídas de una localidad rionegrina o chubutense.
La decoración exterior del museo -cuya remodelación demandó una inversión de 1.700.000 pesos- ha sorprendido a más de un vecino pues la piedra laja zapalina es una marca registrada.
Fuentes cercanas a la entidad -que depende de la dirección provincial de Minería- indicaron que la decisión de usar un material foráneo fue de los encargados del proyecto que buscaron un detalle distintivo a la obra, ubicada en Etcheluz y Ejército Argentino. La decisión no cayó para nada bien en algunos vecinos y mucho menos entre las personas ligadas a la explotación minera.
El museo Olsacher de Zapala es uno de los más importantes de la provincia.
En su interior guarda, además de piezas minerales, una de las más impresionantes colecciones de fósiles marinos de la Argentina. Hay, por caso, reptiles marinos de todos los tamaños, amonites, caracoles, peces y otros materiales que figuran en publicaciones científicas especializadas de todo el mundo.
La nueva cara del edificio no ha pasado desapercibida para los muchos mineros zapalinos quienes pasaron de la extrañeza al enojo. Uno de ellos, consultado por este diario, comentó que en las licitaciones que se hacen en la Capital Federal los pliegos directamente dicen: "tantos metros cuadrados de piedra laja zapalina". Esta persona, que pidió no ser mencionada, recordó que la mayoría de las muestras de mineral y los fósiles fueron donados por dueños o encargados de las minas de la zona.