El juez de Instrucción penal Osvaldo Barbero, quien investiga el asesinato del Tesorero de la Federación Argentina de Camioneros, Abel Beroiz, negó ayer al confeso homicida Raúl Flores su pedido para ser trasladado a otro penal.
Flores había requerido ser mudado de la cárcel de Piñeiro a la alcaldía de Rosario bajo el argumento de sentirse presionado. Así lo informó el abogado defensor de Flores, Gonzalo Basualdo.
También aseguró que su defendido tampoco fue autorizado a internarse en una granja especial para realizar un tratamiento de desintoxicación por su adicción a las drogas.
A lo único que accedió el juez es a permitirle que utilice una radio portátil sin cable, para evitar que se auto agreda como lo ha hecho en otras oportunidades.
Por otra parte, trascendió de fuentes judiciales que el próximo lunes vence el secreto de sumario y no se descarta que el magistrado disponga en los próximos días una nueva detención. También podría postergar el vencimiento con nuevos argumentos.
Actualmente cuatro personas se encuentran detenidas por el crimen del secretario general del gremio de los Camioneros de Santa fe: Raúl Flores, de 23, quien admitió haber efectuado tres disparos contra Beroiz; Ricardo "Chiqui" Bustos, de 34, tío de Flores, sospechado de participar en las conversaciones previas al crimen y de haber entregado el arma blanca; y Julio César Jerez, 33, el gestor que supuestamente contactó al homicida y lo trasladó al lugar de los hechos.