CENTENARIO (ACE).- El hallazgo de los cuerpos de dos bebés de menos de 30 meses en un canal de riego conmocionó a los vecinos del Casco Viejo de Centenario al caer la tarde de ayer. Anoche fueron ubicados el padre y los abuelos de las criaturas pero no hay rastros de la madre, una joven de 17 años.
Según las fuentes consultadas anoche, los cuerpos no presentaban golpes al menos recientes, y llevaban poco tiempo en el agua. Hoy se harán las autopsias.
El aviso a la Policía sobre la presencia de los cadáveres lo hizo uno de los tomeros del Consorcio de Riego de Centenario a las 18:10. Se trata de una niña de dos años y medio de edad y un varón de entre tres y seis meses.
Pasadas las 20:30 un jornalero del sector sur de Vista Alegre de apellido Rodríguez, de 23 años, se presentó en el hospital de Centenario en busca de su mujer e hijos, debido a que llegó a su casa al término de la tarea en las chacras y no encontró a su familia. La vivienda estaba en orden pero abierta, se señaló.
Como las edades de los niños coincidían con los menores hallados, anoche la Justicia intervenía para determinar si se trata de los hijos del peón rural. Hasta el cierre de esta edición no había indicios sobre el paradero de la madre.
A la hora que aparecieron los cuerpos en el canal principal estaban abiertas todas las compuertas desde Vista Alegre -en la bocatoma- hasta la última zona de riego de Centenario, debido a que es el horario pleno de regadío, informó el Consorcio.
Por eso, los pequeños cuerpos pudieron haber hecho un recorrido de más de 10 kilómetros por el agua sin haberse detenido en las compuertas.
El tomero halló el primer cuerpo a las 18:10 en momentos en los que medía los niveles: en el agua vio a una niña de unos dos años y medio de edad que estaba enredada en las raíces del canal principal.
Fue en un sector denominado "puente de Villar", en las cercanías de la zona industrial, a la altura del "picadero".
En esa área rural el canal principal de riego tiene un trayecto cercano a una juguera y a un galpón de empaque ubicado detrás del barrio Parque de Centenario, el ultimo sector urbanizado del casco viejo que linda con las chacras.
Ese tramo del canal principal no está cementado. El tomero levantó el cuerpo del agua y en apariencia aún no tenía la rigidez cadavérica. Desde que la sacaron del agua hasta que llegó al hospital le practicaron tareas de reanimación sin resultado.
Tres kilómetros aguas arriba del "puente de Villar", el tomero volvió a encontrar otro cuerpo, esta vez en una zona cementada del canal y aprisionado en una de las compuertas que deriva el riego hacia un canal secundario.
El hallazgo se hizo a la altura del "puente de Ortuño", casi en la intersección de Belgrano con la calle rural que viene de la juguera.
El cuerpo sin vida de un bebé con ropas de niño -de un tiempo de vida estimado entre los 3 y los 6 meses- fue retirado alrededor de las 20 de allí.
La oscuridad en la zona de chacras después de las 19 complicó toda la labor en la zona. La fiscal de Graves Atentados contra las Personas, Sandra González Taboada, permaneció en las inmediaciones del canal principal hasta pasadas las 20:30 y luego se fue hasta la comisaría Quinta para hablar con mayor detalle con los tomeros y los integrantes del Consorcio de riego.
A esa hora prácticamente no se veía nada en las inmediaciones del canal principal. A pedido de la Justicia, el consorcio cortó el agua pasadas las 19, por lo que se calculaba que para hoy el canal principal podría estar sin agua y se lo podrá recorrer en busca de más indicios.