BUENOS AIRES (DyN) - El gerente de Planeamiento Institucional de Sidor, Luis Domínguez, sostuvo ayer que el presidente venezolano, Hugo Chávez, debería "reconsiderar" la nacionalización de la empresa, y afirmó que "hay voluntad" de la siderúrgica de concluir la negociación del contrato colectivo de trabajo. Asimismo, Domínguez advirtió que "está en juego el ideal de la integración del Mercosur".

El gobierno venezolano anunció ayer la nacionalización de Sidor, una empresa siderúrgica controlada por la argentina Techint, a través de Ternium, luego de que fracasaran las negociaciones en torno a un prolongado conflicto gremial.

El ejecutivo de Sidor sostuvo a radio América que "existe espacio para releer el tema", y aseguró que "hay voluntad de Ternium de llevar adelante y concluir el contrato colectivo" de trabajo Afirmó que "el presidente Chávez no se ha pronunciado todavía" con la empresa para oficializar la decisión, y se mostró confiado en que "el gobierno argentino sepa defender" a Techint.

Abogó porque "la estrecha relación personal que mantiene el presidente (Chávez) con la presidenta (Cristina Fernández de) Kirchner, e inclusive el vínculo personal que desarrolló a lo largo de este tiempo con Don Paolo (Rocca) tenga algún peso en la reconsideración" de la medida tomada. Domínguez destacó que "Sidor es un ejemplo precursor por muchos años de lo que hoy en día se intenta concretar, que es la incorporación de Venezuela al Mercosur".

Indicó que "Sidor desde hace más de 10 años es un ejemplo palpable de lo que pueden hacer juntos y trabajando codo a codo, venezolanos, argentinos y brasileños". "Hemos sacado a Sidor del marasmo en que se encontraba en los '90 y se convirtió en modelo", remarcó el ejecutivo.

La Unión Industrial Argentina (UIA) embistió contra el gobierno de Chávez en defensa del Grupo Techint, al poner en duda su vocación de integración al Mercosur. En un Comunicado, la UIA "advirtió" sobre las "consecuencias negativas" de la iniciativa del gobierno venezolano, "de cara al avance de la integración comercial y productiva de la Argentina y Venezuela" . También señaló que la entrada de Venezuela como socio pleno del Mercosur "requiere, sin duda, relaciones comerciales amigables y de confianza mutua, respeto a las inversiones recíprocas, además del aliento de proyectos de complementación productiva".

En tanto, la Asociación Empresaria Argentina (AEA) expresó su profunda preocupación ante la nacionalización y llamó a la administración Kirchner a interceder ante Chávez. AEA consideró que "es un deber del gobierno argentino defender a las inversiones argentinas en el exterior, ya que éstas son parte fundamental de la proyección internacional de la Argentina".