NEUQUÉN (AR).- El miedo como freno de las decisiones más personales. El miedo como motor de esas mismas decisiones. El miedo paralizante y el otro, el que puede fragmentarnos y transformarnos en lo que no somos; el que gobierna el mundo interior y el que lo atrapa, también. Todos y cada uno de ellos forman parte de la muestra fotográfica "Miedos", de Alejandro Carnevale, que hoy, a las 20.30 quedará inaugurada en la sala Emilio Saraco, en Avenida Olascoaga y vías del ferrocarril, de Neuquén.

Una enorme -pero sobre todo oscura- puerta marca el comienzo de la exposición. Quizás porque, como dice Carnevale, "es más sencillo entrar a los miedos que dejarlos salir".

En todo caso, como si se hubiera acostumbrado a su presencia, Carnevale buscó retratar esos terrores internos que aparecen en medio de la oscuridad. "Son los miedos que nos dominan. Son también limitaciones internas porque al hacernos comportar de determinada manera, nos fragmentan en cosas que quizás no somos. Son los que nos impiden tomar algunas decisiones, y los que a veces, nos ayudan a tomar otras. Todos tenemos miedos. Algunos están más expuestos; otros no. Pero esta es una muestra sobre la oscuridad del miedo. El mundo interior siempre es oscuro", define Carnevale, editor de fotografía del diario "Río Negro".

Estaciones oscuras

Las dieciséis imágenes abstractas que forman la muestra están divididas en siete series. Desde aquel ingreso por esa puerta que apenas se adivina en la oscuridad, hasta el final, la exposición marca un viaje por las siete estaciones de esos miedos capitales, suerte de instantáneas de ese terror que va marcando el compás del recorrido.

"Las series están ordenadas desde una entrada a una posible salida, o al menos, a una búsqueda, permanente, de esa salida. Es que es difícil resolver los miedos porque siempre ingresan otros nuevos. De hecho, la última imagen puede interpretarse como el miedo que se aleja o bien como otro miedo que llega", explica Carnevale.

A diferencia de la muestra anterior, "Perfecta perfección", en la que Carnevale parecía buscar respuestas sobre la esencia en el exterior del ser humano, esta vez, su búsqueda parece más centrada en los complejos laberintos interiores. Y si en la muestra anterior, había color; en ésta, la oscuridad es la dueña.

Pero es también una muestra de dimensiones impactantes. Cada serie de miedos tiene un tratamiento y una forma especial. Los marcos y los tamaños de cada una de esas estaciones está íntimamente ligado con el tema. Hay miedos acotados por los marcos y hay miedos de enormes (que llegan a superar los dos metros).

En ese recorrido visual, "Miedos" aparece como una muestra tan oscura como personal. No sólo para el fotógrafo, sino para todo el que se enfrenta a esos grandes retratos de un sentimiento tan universal como fundante del ser humano.