NEUQUÉN (AN).- El taller que Florencia Gargiulo comanda en el barrio Gamma se ha revolucionado por estos días. Se funde, se pule, se diseña... se sueña.

Aquí, en el atelier, alrededor de 30 mujeres han trabajado duro para un desafío grande: mostrar en Buenos Aires el fruto de un prolongado trabajo. Será en la Rural de Palermo. Y hasta allí viajarán buen parte de las alumnas de Florencia a mostrar las joyas contemporáneas con matriz neuquina.

"Vamos a tener un stand en la feria Puro Diseño y viajamos con todo el entusiasmo porque hemos tenido una muy buena producción", cuenta Florencia, diseñadora industrial de la Universidad de Buenos Aires y discípula de Jorge Castañón, la cabeza argentina de la vanguardia de los joyeros.

Hay mujeres de todas las edades y están a la vista todos los estilos. Chicas que trabajan con plata y alpaca, una señora que combina técnicas y le saca lustre y prestigia piedras y gemas, cueros con metales, aleaciones de rojos inéditos y cadenas y colgantes que tientan aún al neófito.

Puro Diseño se desarrollará del 8 al 13 en La Rural de Palermo y por estas horas Florencia y esposo Carlos Juiz trabajan en el montaje. Juiz es la persona que se encargó de armar las piezas que le darán forma a la que, por una semana, será la casita de la joyas neuquinas.

"Mi trabajo en joyería moderna está dedicado a componer piezas únicas a través del diseño de la forma, la exploración de distintas técnicas de construcción y su combinación con la paleta de colores que ofrecen los distintos metales y sus aleaciones", explica Florencia quien el año pasado decidió volver a Neuquén luego de pasar 17 años en la Capital Federal.

La joyería contemporánea está en la delgada frontera del arte, la moda y el diseño, definen los expertos en la materia y en Neuquén prendió fuerte a partir del atelier de Gargiulo. "Nos da la posibilidad de crear, nos da las armas y los consejos pero nos deja crear", dice Felisa Zamora, una artesana de Piedra del Águila que todas las semanas llega hasta Neuquén a recibir clases de joyería. Felisa es la mujer de las gemas.

Las alumnas de Florencia llegan desde todo el Alto Valle. Las hay de Neuquén, Plottier, Roca, Centenario y de otras ciudades cercanas. "Ahora que estamos trabajando para la feria me sorprendí por la cantidad y calidad de trabajos de mis compañeras", señaló.