- Mucha Concertación, pero falta diálogo y gestión con Nación, que se traduce en transferencias atrasadas para obras o para productores...
- Sí el acompañamiento se retrasa y se burocratiza. Los fondos para la poda no pueden llegar en la cosecha. También ocurre en Río Negro con el mantenimiento escolar, que siempre es más efectivo cuando se maneja desde el municipio. Los atrasos deslegitiman planteos ideológicos correctos, como el de las retenciones.
- ¿Está cerca ideológicamente del gobierno K, pero se siente incómodo en esa alianza?
- No. Ya antes de la Concertación planteaba mi acompañamiento al modelo porque mejoraba las condiciones de rentabilidad del negocio del turismo y de fruticultura.
- ¿Pero estuvo incómodo en el acto de Parque Norte?
- Sí, pero es otra cuestión. No comparto frases desafortunadas de la presidenta, como los piquetes de la abundancia. Y se están peronizando. Eso fue Parque Norte.
- ¿Entonces por qué fue?
- Porque no renegamos de los acuerdos institucionales de gobernabilidad en las cuestiones macro y vale la pena defenderlos.
- ¿El próximo paso del oficialismo es un partido provincial?
- Ni loco. No me voy ni que me echen de la UCR.
- ¿Ya quedaron afuera con su alineación K y la intervención al partido?
- No. Bariloche es una cuestión para evaluar donde (Marcelo) Cascón ganará por el consenso entre los radicales. Hay que buscar acuerdos internos y generar un espacio para todos. Hay que rescatar lo que hicieron en Bariloche aquellos orgánicos. como Juan Pablo Álvarez Guerrero o el propio Fernando Chironi.