ROCA (AR).- En la vereda de enfrente a Canal 13, se respira otro humor. Y se transitó otro camino, exactamente el inverso. Cuando Claudio Villarruel asumió el cargo más codiciado de la tevé porteña, el de gerente de programación de Telefé, también tuvo que pasar su pruebas de fuego. Se sentaba en la silla del hombre que había sido sinónimo de éxito y de televisión: Gustavo Yanquelevich.

Villarruel tiene otro estilo. Y le puso su sello a la pantalla. De a poco, casi como para que no se note, torció el timón de su nave para agregarle a la más popular de las pantallas argentinas, programas que le dieron el lustre de prestigioso. Amante del buen cine, Villarruel le sumó el concurso de cortos; pero para no defraudar a la audiencia que siempre había sintonizado esa señal fue pionero con los realities. Lentamente también, logró lo que hasta hace cinco años parecía imposible: que un programa periodístico, con la ironía que lo caracteriza, como "CQC", llegue a su vidriera. En el medio, abrió el camino también para que las telenovelas salieran del rumbo rosa, meloso y predecible. Y en ese plan, logró instalar a "Resistiré" primero y a "Montecristo" después, como programas de culto y de buen rating.

Pero no siempre alcanza. El año pasado, Telefé apostó sus fichas al regreso del reality show. Creyó que era momento de volver a espiar vidas vacías. Y como ocurre tantas veces en la tevé, entre lo que cree el programador y quiere la gente, había distancia. Mucha.

Este año, Telefé quiso dar vuelta la suerte apostando de lleno a la ficción. Contrató nuevamente a Florencia Peña para hacer una nueva sitcom, esta vez argentina, y fracasó. Contrató a Facundo Arana, una de las figuras más fuertes de la telenovela local, y su "Vidas robadas" no logra instalarse. Apuró a Marley, suerte de comodín de la grilla, con "El muro infernal", y no puede remontar la pared. Y encima, deberá esperar a Susana hasta junio.

Villarruel seguramente sabe que la semana próxima no será fácil. La llegada de Marcelo Tinelli no hará más que complicar el panorama de su alicaída propuesta nocturna. Por primera vez, el rating le da la espalda durante seis meses seguidos. Y en el prime time, el horario más codiciado de la tevé (entre las 20 y la medianoche), Canal 13 lo supera por seis puntos. Demasiado para el canal que supo ser primero. Y que, al menos hasta ahora, no parece tener un plan B para dar vuelta el rating de 2008.