La presidenta Cristina Fernández reclamó hoy en París el apoyo de gobiernos latinoamericanos para lograr la liberación de Ingrid Betancourt, mantenida como rehén hace seis años por los guerrilleros de las FARC, y que el gobierno colombiano cese "las operaciones militares" en la selva "para poder arribar a un final feliz en esta triste historia".

Durante una nutrida marcha, la jefa de Estado, vestida totalmente de negro, aseveró a la agencia de noticias France Press (AFP) que "a todos los gobiernos latinoamericanos los llamo a que apoyen el canje humanitario, como lo están haciendo en la medida de lo posible, para superar todos los obstáculos que están impidiendo esta cuestión". "En nombre de esa historia, en nombre de esa libertad, que liberen a Ingrid Betancourt", exigió además durante un breve discurso pronunciado en medio de la movilización a la que concurrieron más de cinco mil personas para recorrer las calles desde la Plaza Opera hasta el Palacio Legislativo.

Señaló que "en nombre del pueblo argentino vine junto a representantes de Abuelas y Madres de Plaza de Mayo a pedir la liberación de Ingrid". Fernández de Kirchner reafirmó su compromiso por "el apoyo a la liberación de Ingrid Betancourt y al canje humanitario, que es una cuestión que por sobre todas las cosas debe prevalecer", y sentenció que "la libertad de Ingrid Betancourt es algo imperioso". "Quiero dirigirme a todos los que hemos marchado juntos, a los familiares de Ingrid, a toda Francia, a su madre Yolanda, que seguramente nos escucha, en Colombia, a tí Ingrid que seguramente nos escuchas en la selva colombiana, que no abandonaremos esta lucha, que es la lucha por los derechos humanos, por el canje humanitario", destacó.

 También abogó "porque el gobierno de Colombia también comprenda que deben cesar las operaciones militares para poder arribar a un final feliz en esta triste historia". "Y quiero darles el compromiso de mi corazón de acompañarlos siempre en esta lucha porque estoy convencida de que la única batalla que se puede perder es la que no se da", culminó.

De la denominada "Marcha Blanca" participaron también Carla Bruni (esposa del presidente francés Nicolas Sarkozy) y el canciller Bernard Kouchner, además de Estela de Carlotto, titular de Abuelas de Plaza de Mayo, y Marta Vázquez, de Madres de Plaza de Mayo Línea Fundadora.

También lo hicieron Astrid Betancourt, hermana de la rehén, con quien la presidenta mantuvo un encuentro privado, la secretaria de Estado francesa para los Derechos Humanos, Rama Yade, y el alcalde de París, Bertrand Delanoe. Mañana lunes Cristina Fernández se reunirá con el alcalde de París, Bertrand Delanöe, y a las 13 almorzará con su par Nicolas Sarkozy en el Palacio del Elíseo, sede del gobierno de Francia.

Fuente: Dyn