SAN MARTÍN Y JUNÍN DE LOS ANDES (ASM).- El fuego desatado el miércoles sigue consumiendo bosques nativos en el área Lolog, donde ya arrasó con 450 hectáreas, y las noticias no son alentadoras, porque fue declarado otro foco en el valle Magdalena, al noreste del volcán Lanín, en una zona de veranada de las comunidades mapuches.
Para iniciar el combate de este nuevo foco se destinaron los dos aviones hidrantes que se encuentran operativos en la zona, hasta tanto lleguen al lugar las primeras brigadas del Sistema de Manejo del Fuego de la provincia de Neuquén, que fueron trasladadas en helicóptero desde la ciudad de Junín de los Andes.
Una vez confirmado el riesgo del incendio en la veranada, se evaluará la redistribución de los recursos humanos y materiales que se disponen para combatir el fuego, contando a los 12 brigadistas que llegaron ayer de los parques nacionales Lago Puelo y Los Alerces, según se informó desde la intendencia del parque Lanín.
En el incendio de Aunquinco, área Lolog (que ya había consumido 2.200 hectáreas en febrero y marzo), el fuego se comportó de forma virulenta ayer, avanzando rápidamente en dirección noreste, para ingresar en un bosque mixto de lenga y coihue sobre la llamada Loma Atravesada, unos cinco kilómetros al oeste de Puerto Arturo. El fuego reavivado consumió otras 450 hectáreas.
Como consecuencia, el parque decidió suspender provisoriamente los cotos de caza Auquinco, Mallín de los Ciervos y Huaiquihue.
El recrudecimiento del fuego en Lolog se produjo en momentos en que el personal bajo contrato del parque nacional Lanín mantenía diferencias en ciernes con autoridades de la institución, por las evaluaciones de desempeño durante el gran incendio desatado en la misma zona, en febrero último, y que demandó el trabajo a destajo de más de 100 personas y medios aéreos.
Según trascendidos de fuentes cercanas a la administración del parque, la disputa se había instalado tanto por las evaluaciones como por aspectos contractuales, aunque estos últimos ya habrían sido salvados. El surgimiento de este nuevo foco obligó a posponer las conversaciones con el personal, que una vez más fue convocado a las tareas de ataque inicial contra las llamas.